El seguro de vida gana popularidad con la COVID-19
Una de las pólizas que más popularidad está alcanzando entre los españoles es la de vida. No en vano, la actual pandemia nos ha dejado más que claro lo vulnerables que somos y cómo un virus de origen desconocido puede amenazar nuestra existencia de una manera que no creíamos posible.
Así, se han vuelto numerosas las consultas tanto de ciudadanos como empresarios que quieren informarse acerca de la conveniencia de esta clase de pólizas.
En este sentido, conviene saber que los seguros de vida suelen cubrir los riesgos derivados de pandemias sin mayor problema. Por lo tanto, nada impide que los nuestros sean indemnizados en caso de que el asegurado fallezca a causa de la COVID-19. No en vano. el seguro de vida cubre el fallecimiento por cualquier causa ya sea muerte natural, enfermedad o accidente, entre otros.
No obstante, es posible que los nuevos solicitantes que hubieran contraído la enfermedad y padezcan importantes secuelas derivadas de ésta tengan que asumir un encarecimiento de la prima básica o incluso ser excluidos del derecho a contratación. Pero existen más circunstancias que pueden impedir que podamos acceder a esta clase de pólizas, aunque todo dependerá de lo que establezca la compañía en concreto a la que acudamos.
¿Quiénes pueden verse excluidos?
– Las personas mayores de 65 años. Lo cierto es que la edad ideal para suscribir un seguro de vida suele situarse al comienzo de nuestra vida laboral. Es decir, entre los 30 y los 40 años y especialmente cuando empezamos a tener personas a nuestro alrededor que dependen de nuestros ingresos.
– Aquellos que padezcan enfermedades graves.
– Los profesionales que trabajen en sectores de riesgo.
– La Ley del Contrato del Seguro prohíbe la contratación del seguro a los incapacitados, así como tampoco se les permite a los menores.
– Las personas aseguradas deben residir en España. Por lo tanto, se les exige que dispongan de su residencia fiscal en el territorio nacional.
Los seguros de salud, otra póliza en la diana
Pero los seguros de vida no son los únicos que están ganando presencia. En este sentido, también los seguros de salud convencen cada vez a más personas, especialmente jóvenes y residentes en grandes urbes, que desean reforzar su asistencia sanitaria. De hecho, según una reciente encuesta realizada por Bain & Company sobre el ‘Impacto de la Covid-19 en el consumo de servicios financieros’, el 27 % alberga la intención de suscribir un seguro de este tipo a corto plazo, mientras que un 5 % de las personas que ya cuentan con seguro de Salud, quieren modificar las coberturas contratadas.
En definitiva, la COVID-19 parece estar alterando nuestros hábitos y buscamos más que nunca la seguridad que nos proporciona una póliza de vida o salud.
Y con la eutanasia, no te digo ya…