La semana ha comenzado con los ERTE como principales protagonistas de la actualidad económica en nuestro país.

Según se ha podido conocer a través de las informaciones publicadas por ‘Voz Pópuli’, miles de personas no han cobrado la prestación correspondiente al mes de noviembre, y que debería haber sido ingresada el pasado día 10. En este sentido, los afectados recibirán esta cuantía el próximo mes de diciembre como consecuencia de un cambio burocrático en el sistema.

El retraso en el pago se produce después de que el Gobierno aplicase la aprobación de un nuevo Real Decreto-Ley en Consejo de Ministros por el que se renovaba la prórroga de los ERTE. En este sentido, se daban por finalizados todos los ERTE anteriores al 30 de septiembre y por ello las empresas que tuvieran que seguir bajo el amparo de esta medida deberían formular una nueva solicitud colectiva de prestación antes del 20 de octubre. De esta manera, las empresas deberán notificar cada mes los ERTE mediante un archivo XML diferente al que se había utilizado desde el mes de marzo, que era en formato Excel.

En la última negociación de los ERTE entre el Gobierno y los agentes sociales, estos últimos expresaron al Ejecutivo su sorpresa al conocer que las empresas deberían volver a pasar por el trámite de enviar las solicitudes colectivas para sus empleados y por tener que enviar cada mes un nuevo documento aunque las empresas no hayan regresado a sus actividades.

Esta nueva mecánica provoca que el pago a los trabajadores de empresas que no han retomado todavía su actividad, y que venían cobrando las prestaciones con total normalidad, pasen ahora a cobrar las cuantías a dos meses vista. En este sentido, en diciembre cobrarán la cuantía de octubre y en enero la de noviembre. Todo este nuevo proceso burocrático se une a una importante ola de pagos indebidos pendientes de ser corregidos, y que los expertos ya han señalado que pueden afectar de lleno a la declaración de la renta del próximo 2021.

El papel de los ERTE en la próxima declaración de la renta

En este sentido, los ERTE irrumpirán la próxima primavera en las declaraciones de la renta de miles de empleados de nuestro país. Los contribuyentes que se han visto dentro de un ERTE, aunque cobren menos de 22.000 euros en total si han percibido más de 1.500 euros de un segundo pagador, deberán presentar la declaración de la renta y Hacienda procederá a realizar el ajuste que considere oportuno. Ante esta situación, el sindicato de Técnicos de Hacienda ha avisado a los empleados que pidan a sus empresas que les eleven la retención en sus nóminas en esta recta final del año.

A este dato se unen los posibles errores que el SEPE ha podido cometer en el pago de los ERTE y que incidirán de forma directa en las declaraciones de la renta de los trabajadores afectados. Cualquier tipo de error con el concepto que tenga Hacienda relativo a cada trabajador será independiente en el trato que se le aplique a la hora de rendir cuentas a la Agencia Tributaria, ya que a pesar de los errores que haya podido haber cometido el SEPE han percibido prestaciones que no eran del todo correctas y todas ellas sin retención de IRPF.