Por Julio Fafian.- El malestar general de la Hostelería se moviliza a miles de personas con un claro “basta ya”, y La Coruña fue la ciudad elegida.

En una ciudad que vive principalmente del turismo y del ocio, miles de familias dependen directamente de los ingresos que se generan en este sector.

El mensaje dirigido a las administraciones fue claro:

Ayudas ya, salvemos la Hostelería.

Y más claro agua, sin gas del tiempo, por favor!

Héctor Cañete, presidente de la Asociación Provincial de Hostelería: “Dos demandas: Primera, como no podemos pagar impuestos si no podemos trabajar, que se pare el cobro de los mismos. Segunda, si nos obligan a cerrar, que sea acompañado de ayudas, como sucede por ejemplo en Alemania, que se está abonando un 75% de la facturación del año pasado”.

Soluciones servidas en bandeja. Sólo falta saber quién terminará pagando la cuenta.