El all-in del continente asiático: el encanto de los lugares menos visitados
Asia es un continente que esconde muchos rincones mágicos, países como Tailandia, Vietnam, Camboya o Indonesia acogen a turistas durante todo el año y se convierten en postales de ensueño para muchos. La mayoría de países del Sudeste asiático son destinos turísticos muy conocidos, sin embargo, cada uno de ellos guarda gemas escondidas a las que apenas llegan visitantes, y si lo hacen, prácticamente son solo nacionales. Y es que Tailandia no es solo las playas en las que se bañaba Leonardo DiCaprio durante el rodaje de “La playa”, y lo mismo ocurre con el resto.
Indonesia, mucho más que Bali
Bali es un buen ejemplo. Esta isla de Indonesia es visitada todos los años por millones de turistas que se acercan a ella para recorrer su naturaleza, como las frondosas montañas volcánicas, los arrozales y las playas paradisiacas, ya sea para surfear, como la playa de Kuta, o para ver arrecifes de coral. Considerada como una de las islas más bonitas del mundo, tiene su propia historia y cultura, por lo que tampoco faltan monumentos para visitar, como el templo Uluwatu. Es un lugar idílico para los amantes del mar y la naturaleza, pero también para los que prefieren pasar su tiempo libre haciendo deporte, sobre todo yoga, ya que en la isla hay muchos centros en los que practicarlo y en los que meditar. Pero lo cierto es que Indonesia es mucho que más que Bali, de hecho, también hay muchas más islas que las archiconocidas Lombok, Komodo y Gili. Los que quieran descubrir una de las verdaderas maravillas del país no pueden dejar de visitar uno de los lugares con más encanto: Karimunjawa, un archipiélago de 27 islas en el Mar de Java.
Este conjunto de islas es un paraíso perdido en el que nadie tendrá problemas para relajarse ya que allí todavía no saben qué es la masificación turística. Las playas están totalmente desiertas, son kilométricas y están llenas de cocoteros. La mejor opción para recorrer estos islotes vírgenes es alquilando un medio de transporte, generalmente bicicleta o moto, mientras que para viajar de isla en isla hay varias embarcaciones que se dedican a hacer estos trayectos. ¡Toda una aventura para sumergirse en el ambiente isleño!
Los más inquietos también pueden hacer deporte en sus aguas, como el buceo o el buceo de superficie. Pero no todo es playa, en las islas hay varias zonas rurales con casas de pescadores y de particulares, y es que a veces la mejor forma de conocer un lugar es tomando contacto con su gente. ¿Qué mejor manera de descubrir la verdadera Indonesia que huyendo del turismo de masas?
Singapur, entretenimiento en Sentosa
No muy lejos de Karimunjawa está Singapur, uno de los países más pequeños del continente asiático que recibe muchos visitantes todos los años. Una de sus atracciones principales es su aeropuerto, el Aeropuerto Changi, conocido por toda la vegetación que hay en su interior. Los turistas que hacen escala allí se sorprenden por su belleza, mientras que otros se acercan expresamente a conocerlo, ya que es toda una atracción para los sentidos. Pero si hay un lugar que merece una visita en Singapur y que muchos desconocen es Sentosa, una isla llena de intereses para todos los gustos. Los amantes de la adrenalina y el espectáculo pueden visitar el parque Universal Studios, con 28 atracciones y espectáculos en siete zonas temáticas, mientras que los que pasan su tiempo libre jugando en plataformas de poker online para todo tipo de jugadores y niveles se sentirán como en casa en el Resorts World Sentosa Casino, ya que esta sala de juegos es perfecta tanto para noveles como para expertos. La mayoría de turistas no se alejan del centro de Singapur pero, ¿por qué no salir a explorar esta isla llena de alternativas? Acercarse hasta ella es una decisión más que acertada.
Vietnam, pueblos flotantes por descubrir
Sin embargo, si hay un país que alberga lugares a los que no llegan casi los extranjeros, ese es Vietnam. Es un país lleno de historia que cada vez más personas se animan a recorrer, y es que razones no faltan para ello. Si hay algo de lo que puede presumir Vietnam es de su naturaleza; en el norte, Sapa deja sin aliento a todos los que deciden hacer rutas entre sus arrozales y montañas, eso sí, lo mejor es realizarlas una vez han pasado los monzones para poder admirar la vegetación. Un poco más al sur, por su parte, se pueden hacer rutas por lagos y montañas que quitan el hipo hasta a los viajeros más exigentes. Tampoco faltan playas que nada tienen que envidiar a las paradisiacas del Mediterráneo; las de la Isla Phu Quoc son las más bonitas del sur de Vietnam, mientras que Ban Chan es una de las mejores en el norte y China Beach la más turística.
Con tanto que hacer en Vietnam hay algunos lugares casi secretos por los pocos visitantes que reciben. Ese es el caso de Chau Doc, un poblado flotante casi en la frontera con Camboya. Situado en el Delta del Mekong, deja boquiabierto al que lo descubre tanto por sus casas flotantes como por todos los paisajes que hay a su alrededor y es que a tan solo unos kilómetros podemos visitar Sam, un monte con mucha vegetación, y Cajeputier, un bosque en Tra Su con una diversidad excepcional.
Y es que Vietnam, al igual que Indonesia y Singapur, es una caja llena de sorpresas: ¿por qué no descubrir las más desconocidas?