La directora de la Mujer presiona a una empresa por vender placas infantiles que considera sexistas
Ver para creer. La directora del Instituto de la Mujer y para la Igualdad de Oportunidades, Beatriz Gimeno (Podemos), ha remitido una carta a una pequeña empresa de San Sebastián de los Reyes (Madrid) en la que le da un toque de atención por vender unas placas infantiles que, a juicio de esta polémica política, son sexistas.
La misiva tiene fecha del 28 de mayo, firma de Gimeno y membrete del organismo dependiente del Ministerio de Igualdad, que dirige su amiga Irene Montero.
«Me pongo en contacto con usted porque he tenido conocimiento, a través de una queja recibida en el Observatorio de la Imagen de las Mujeres, de la venta por su compañía de la venta de modelos de placas de puertas para habitaciones infantiles en las que se ofrecen versiones diferenciadas en función de si son para niños o niñas; representando piratas y héroes en primer caso, con los mensajes «Aquí duerme un pequeño héroe» o «Aquí duerme un pirata». Y «epresentando princesas en el segunco, con mensajes como «Aquí duerme una pequeña princesa» o «Aquí duerme la reina de la casa».
Beatriz Gimeno continúa la misiva explicando a la empresa que «este tipo de diseños contribuye a fortalecer los estereotipos de género, vinculando a las niñas con el papel tradicional de princesas de cuentos y a los niños con roles vinculados a la acción, como los personajes de acción o súper héroes».
La directora del Instituto de la Mujer no amenaza con ninguna sanción, pero el mensaje de la carta es claramente coercitivo, pues conmina a la empresa a solicitarle que «tengan en cuenta estas observaciones en el diseño de sus productos en general, pero muy especialmente en aquellos dirigidos al público infantil».
Considera, finalmente, que así se «avanzaría en una «sociedad mucho más igualitaria para mujeres y hombres, lejos de roles estereotipados y discriminatorios».
La empresa ha preferido no pronunciarse al respecto por el momento.
(ABC)
Qué se puede esperar de una bollera que se “casó” con un….bueno, estas aberraciones ya no se como se llaman…Yo les digo un/una. Pues con eso.
Pues menos mal que no se han fijado en que todos los niños de las tarjetas son blancos.