Apenas hay datos estadísticos concretos que reflejen otro de los grandes problemas que sufre la sociedad actual: el maltrato a los hombres. Es cierto que, en comparación con los casos de maltrato a la mujer, las situaciones son mucho menores. Pero también es verdad que, no por ello, este asunto debe quedar en el olvido o en un segundo plano.

La legislación vigente determina que las penas por maltrato a la mujer son mucho más duras que las que se aplican hacia el maltrato a los hombres. Sea o no un caso de injusticia legal, cada vez hay más asociaciones en España que se encargan de sacar a la luz esta triste realidad que también sufre el hombre.

Problemas psicológicos en los hombres maltratados

Tal vez esta falta de visibilidad se deba en buena medida a que el maltrato a los hombres no suele acabar con una víctima mortal, algo que sí ocurre con excesiva frecuencia en lo que respecta a las mujeres. Sin embargo, el gran problema al que se enfrentan estos hombres, es al maltrato psicológico y a las consecuencias que esto acarrea.

El hombre maltratado cae en un profundo estado de depresión que le lleva a sufrir un trastorno mental grave. Su autoestima se ve por los suelos ante la falta de credibilidad y la vergüenza que siente al interponer una denuncia o pedir ayuda psicológica ante una situación de este calibre.

Una de las principales ayudas que puede recibir es la que procede de los abogados de hombres maltratados. La figura jurídica en estos casos es fundamental, ya que el hombre no sólo va a sufrir un maltrato físico y psicológico, sino también institucional. Un abogado de este tipo, será capaz de asesorar en todo momento, al hombre que se halle en una situación así.

Contar con la ayuda de un especialista en maltrato hacia el hombre va a servir de gran ayuda. Un abogado es una persona de confianza para que el hombre pueda contar su experiencia sin sufrir ningún tipo de vergüenza o rubor por ello. A partir de aquí, será el profesional encargado de llevar a cabo todas las actuaciones legales posibles.

Una realidad silenciosa

En muchas ocasiones, el maltrato a los hombres se suele definir con el término “realidad silenciosa”. Esto es así porque, tal y como se ha comentado anteriormente, el hombre maltratado guarda silencio ante la situación. El miedo al ridículo y la vergüenza pueden en la mayoría de los casos.

Sin embargo, también se trata de una realidad silenciosa por el hecho de que el hombre apenas cuenta con el apoyo jurídico e institucional. Curiosamente, no existe un servicio o un teléfono de emergencia al que el hombre pueda acudir en caso de maltrato físico o psicológico por parte de la mujer.

Sí es posible, en cambio, acudir a las Oficinas de Asistencia a las Víctimas de Delito o a diversas asociaciones que se encargan específicamente de asesorar al hombre en estos casos. También sería muy recomendable solicitar la ayuda de un trabajador social, un psicólogo y un abogado especialista.

La prevención es la única manera de poder acabar precisamente con esta realidad silenciosa. La educación del no a la violencia desde edades muy tempranas es el primer paso que hay que seguir.

En definitiva, todo el mundo sabe que el maltrato a las mujeres es un grave problema que se asienta en la sociedad. Sin embargo, y aunque en menor medida, no por ello hay que obviar que el hombre también sufre problemas de este tipo. Una situación que se ve agravada por el hecho de no recibir el mismo amparo legal e institucional.

La figura del abogado de hombres maltratados es, por tanto, fundamental en este tipo de casos. Un profesional que no sólo hará una labor jurídica, sino que en muchos casos, sirve incluso como apoyo psicológico ante una situación a la que no se suele encontrar solución por uno mismo.