¿Sabes cómo han sido tratados los celos en los medios artísticos?
Los celos forman parte de la esencia de muchos seres humanos. Algunos los relacionan con baja autoestima, otros se orientan a que es una forma de demostrar amor. ¿De qué forma ha influido el medio artístico en el concepto de celos que maneja la sociedad? Vamos a descubrirlo.
La historia ha traído consigo miles de eventos que se han transmitido de generación en generación. Entre ellos nunca falta alguna tragedia vinculada a una etapa de celos, donde la locura genera un colapso sobre los sentidos y lleva a hacer cosas que hasta ese momento parecían impensables.
Los celos han sido el ingrediente fundamental en muchas historias de la literatura o el cine, donde se han creado personajes que sufren por este sentimiento.
Los celos de la Reina de Castilla fueron los responsables de hacer enfermar a su protagonista (Juana La Loca) y convertirla en objeto de obras cinematográficas y literarias.
Para los que no conocen esta historia, estuvo basada en la relación amorosa enfermiza que vivió la Reina Juana I de Castilla, más conocida como Juana La Loca, con su esposo Felipe El Hermoso. El desenlace fue terrible, pues tras la muerte de su esposo perdió la razón y por la voluntad, primero de su padre y después de su hijo, se pasó casi 50 años en encierro obligatorio en el castillo de Tordesillas.
Como ésta existen miles de historias, tanto en la literatura como en el cine, que han visto en vivencias reales o ficticias una buena base para desarrollar ideas exitosas.
Los celos como estrategia para captar la atención
Desde muchos puntos de vista, los celos son un arma que pueden utilizar los creadores de historias para lograr que el público se sienta motivado a seguirlas. Al final, esta es la principal razón para que día a día se invierta tiempo y recursos en materiales de distintos formatos. Aunque todos tienen el mismo objetivo: alcanzar el éxito y lograr el mayor público posible.
Pues bien, el hecho es que la forma de abordar este sentimiento no es siempre la misma. Se tienen versiones donde la etapa de celos es parte de la forma de ser de un personaje, y su desarrollo a lo largo de la trama va haciendo que esto cambie para bien o para mal. Otras en que los celos están vinculados a situaciones reales que llegan a ser comprobables en algún momento.
El caso es que la presencia de los celos se ha visto como indispensable en las historias de amor. Ya sea porque se considera que son parte del amor o que sin ellos cualquier historia de amor carecería de sentido.
Los celos son el protagonista principal de numerosas obras literarias, algunas con trágico final como el Otelo de Shakespeare. En otras obras los celos, sin formar parte primaria de la historia, logran generar un rotundo cambio dentro del desarrollo de la obra, haciendo que el posible objetivo planteado al principio no sea el mismo que se consigue al final.
Los celos en el cine
Dentro de lo cinematográfico, los celos también han jugado un papel protagonista. Muchas historias llevadas a la gran pantalla tienen su génesis en relatos verdaderamente exitosos dentro del campo de la literatura, como los dos mencionados ya anteriormente.
Sin embargo, no es menos cierto que también se ha reinventado la forma de presentar este sentimiento dentro de historias de amor rosa, cuya parte principal se orienta a un conflicto real entre los protagonistas y antagonistas.
¿La tragedia? Puede que sí. Ha llegado a aparecer en versiones de tanto impacto como Atracción Fatal, que acaba con una protagonista que literalmente muere de celos, o Te doy mis ojos, un filme que demuestra cómo los celos son una base sólida para lograr que cualquier historia de amor, por fuerte que sea, colapse cruelmente.
Parejas y celos
En muchas ocasiones estas historias están plagadas de creaciones mentales cuya comprobación es dudosa. Tal es el caso de Otelo, quien se atrevió a estrangular a su esposa por la presunción de que ésta le era infiel con otro de los personajes de la historia, conocido como Yago.
La vida real no escapa mucho a lo que estas tramas ficticias cuentan. Parejas de todas las clases sociales, de países desarrollados o subdesarrollados, con hijos o sin ellos, con 2 o con 20 años juntos tienen las mismas posibilidades de sufrir de conflictos reales, profundos y hasta peligrosos, vinculados a los celos.
Esto no significa que sentir celos sea del todo malo. Al contrario, puede ser una oportunidad de empuje a las relaciones, logrando que se intensifique el amor, la confianza mutua, el respeto y la fijación de un mensaje de “me importas, y mucho”.
La clave está en la profundidad del sentimiento, en la internalización de que no pueden ser episodios constantes, latentes, basados en suposiciones y con un nivel de complejidad muy elevado.
Existen momentos donde un toque de celos en el fondo del corazón se vuelve normal. Si uno de los miembros de la pareja emprende un viaje de negocios con 2 compañeros del sexo opuesto a una ciudad hermosa, la alarma interna de celos puede encenderse, pero teniendo pleno conocimiento de que es un asunto de trabajo.
Se pueden establecer tratos para ayudar a mantener un vínculo de comunicación abierto, donde el otro pueda estar al tanto de todas las actividades y así sentir que está formando parte, de alguna manera, de ese viaje.
Una de las formas que proponen los especialistas para lograr hacer frente a las escenas de celos provocadas por la pareja es invitar a mantener un lenguaje limpio. Esto se refiere a realizar las preguntas que considere hacer para sentirse bien, pero sin enmascararlas con acusaciones, malas palabras o frases de doble sentido.
Los celos incontrolables forman parte de relaciones enfermizas y deben ser tratados por profesionales en la materia. Uno de los errores más frecuentes es asumir que el problema es solo del celoso, pero la realidad es que es de los dos. Dicen por ahí que no existe victimario sin víctima.
El caso es que este es un tema que tiene mucha tela para cortar y es por eso que poetas de distintas nacionalidades, en diversos tiempos y con formas de vida totalmente diferentes han encontrado en el tema de los celos la inspiración para desarrollar tramas que se hacen originales e interesantes para una sociedad que, aunque parezca muy avanzada, sigue sin saber cómo controlar muy bien esta clase de sentimientos.