El esoterismo y el tarot
A pesar de que todos conozcamos palabras como “videncia”, “astros” o “tarot”, no todo el mundo sabe realmente lo que significan esos términos y lo que supone en nuestra vida acudir a un buen tarot, como el que nos ofrece tarot 10. De hecho, todos hemos pasado por momentos en nuestra vida donde la tensión, el miedo o la incertidumbre han marcado nuestro día a día y han impedido que veamos con claridad más allá y sin duda es en esas épocas donde el tarot nos puede ayudar más, especialmente si vamos con una actitud 100 % receptiva y con ganas de conseguir la respuesta que tanto tiempo llevamos esperando para nuestras dudas. Una actitud que debe dejar de lado el escepticismo, los prejuicios y las ideas preconcebidas que tiene mucha gente y que debe dar paso a un don que ya ha demostrado su eficacia muchas veces. Al fin y al cabo, el tarot es un arte complejo y centenario que se ha ido entendiendo en mayor profundidad y perfeccionando con el paso de los años.
¿Qué tipos de tarot existen?
Como ya hemos comentado, el tarot es un arte que lleva acompañando al ser humano cientos de años. Si bien es cierto que sus orígenes se remontan a los tiempos ancestrales donde era habitual practicar el conocimiento del destino de las personas, desconocemos cuál es el verdadero origen del tarot tal y como lo conocemos. De hecho, algunos piensan que comenzó en Oriente (o incluso en el antiguo Egipto) mientras que otros ven su origen en la Edad Media. En cualquiera de los casos, lo que sí está claro es que los símbolos que aparecen en las cartas del tarot son de lo más variado, con influencias cátaras, gnósticas, cabalísticas, etc. Motivos por los cuales se piensa que el tarot comenzó en Oriente o, que al menos, tiene una relación muy estrecha con esa época de la historia de la humanidad.
Por otro lado, y como no podía ser de otra manera sobre todo si tenemos en cuenta esta gran diversidad de opiniones sobre el verdadero origen del tarot, existen varios tipos de tarot. Entre los más conocidos cabe mencionar el tarot celta, el tarot lunar, el tarot sí o no y el tarot de Marsella, sin duda el que mayor aceptación tiene a día de hoy.
El tarot de Marsella: el referente actual
A pesar de que los diferentes tarots compartan una base y tengan unas características muy parecidas, cada uno de ellos tiene una serie de peculiaridades que los hace especiales. En ese sentido, el tarot de Marsella, formado por 22 Arcanos Mayores y 56 Arcanos Menores, surgió en el siglo XV y desde el primer momento estuvo muy ligado a los naipes (de hecho, se cree que estos últimos surgieron gracias a las cartas del tarot). Pero no solo eso, ya que a finales de la Edad Media este tarot sufrió una gran represalia por parte de la Iglesia, que asociaba el tarot a una forma de pecado y que comenzó toda una cruzada para quemar las barajas que se usaban. Sin embargo, y a pesar de los esfuerzos de la Iglesia por eliminar del todo este arte, una de las barajas se salvó, la conocida como la baraja Visconti y que hoy en día es una de las barajas más famosas del tarot.
¿Qué significan las cartas del tarot?
Siguiendo con el tema de las barajas y de las cartas del tarot, es interesante hablar un poco más acerca de ellas y de los significados que esconden. Ya hemos dicho que a pesar de las peculiaridades que tiene cada tipo de tarot, todos comparten una misma base y unas características parecidas, entre otras, las cartas, que siempre tienen el mismo significado independientemente del tipo de tarot que nos encontremos. No obstante, en función de cada consultante y, por supuesto, de cada tarotista, la interpretación que se puede hacer de esas cartas será diferente. De hecho, cuestiones como la actitud y la receptividad del consultor, su estado anímico a la hora de hacer la tirada, sus prejuicios y sus creencias, etc. serán determinantes para interpretar lo que nos dicen las cartas. Por ese motivo es tan importante contar con un buen tarotista que tenga los conocimientos y la sensibilidad necesarios para poder captar todos estos matices que tendrán una influencia determinante en la lectura. Además, no debemos olvidarnos de que el diseño de las cartas no está hecho al azar, sino que tiene un porqué, tiene una gran carga simbólica que refleja los años de estudios de todo tipo de ciencias y cuyo fin último es servir como una guía, como un marcador del camino que tenemos que recorrer y que no vemos en los momentos en que estamos perdidos.
Con todo mi respeto hacia quienes practican estas “ciencias”: me parecen un fraude y un engaño.