Cristina Cifuentes

Una intervención telefónica incluida en el sumario del caso Lezo revela los intereses contrapuestos entre los dos principales accionistas de La Razón, Planeta y Edmundo Rodríguez Sobrino -representante del empresario mexicano José Ramiro Garza Cantú-, y el papel de Mauricio Casals como puente entre ambos.

La conversación, desvelada por «El Español» se produjo el 26 de octubre cuando Rodríguez Sobrino llamó a Casals para contarle que «en el consejo, Creuheras (presidente de Planeta y Atresmedia) dijo que había que tratar bien a la Señora (Cristina Cifuentes) porque van a dar dos universidades y ellos quieren aspirar a una, y para ellos es muy importante la operación».

Se refería al proceso puesto en marcha por la Comunidad de Madrid y añadía, refiriéndose a Creuheras: «¡Qué hijo de puta es!». Casals parece darle la razón y repite varias veces: «Acojonante, sí, sí, acojonante». «Me han estado tomando el pelo», se quejó Rodríguez Sobrino al explicar la resistencia de Planeta a proseguir con la presión de «La Razón» contra Cifuentes y a sumar a ella al resto de Atresmedia, tal y como le prometió Casals.

Tratando de contener su enfado, Casals le dijo que «el objetivo es parar la judicialización», y le aconsejó: «Lo mejor es hacerse siempre el boludo». Rodríguez Sobrino le insinuó en otro momento en que «no estaría de más que se sepa por ahí que Planeta pueda verse favorecido con una universidad privada». Y añade: «Porque, macho, ya les han dado bastantes cosas, ¿no?».