La 89 edición de los Oscar, presentada por Jimmy Kimmel, fue vista por 32,9 millones de espectadores, la audiencia más baja registrada por la ceremonia en los últimos nueve años, informó The Hollywood Reporter.

Se trata de la gala menos seguida desde la entrega de 2008, que contó con Jon Stewart como anfitrión y que reunió a 31,8 millones de espectadores.

La última entrega registró un descenso del 4% de rating respecto de los del año pasado, cuando Chris Rock se encargó de amenizar la premiación.

Parecía que la noche iba a concluir con un final “hecho en Hollywood” para La La Land, ganadora de seis Oscar, pero un error histórico al anunciar el premio a la mejor película, que fue a parar a Moonlight, le robó el protagonismo en un inesperado giro de los acontecimientos.

Fue el mayor fiasco en la historia de los Oscar, que de momento se ha saldado con una disculpa de la auditora PricewaterhouseCoopers (PwC), la empresa encargada de recibir, contabilizar y velar los resultados.

Todo apunta a un error humano de Brian Cullinan y Martha de la Torre, miembros de la consultora y responsables de custodiar los sobres con los nombres de los ganadores hasta entregarlos a los respectivos presentadores, en este caso, a Warren Beatty y Faye Dunaway, quienes fueron los encargados de anunciar el ganador a la mejor película.