El gran desafío es la robotización, no la globalización, según el jefe de la OMC
El director general de la Organización Mundial del Comercio (OMC), Roberto Azevêdo, arremetió hoy contra los discursos proteccionistas por ser contraproducentes y aseguró que el gran desafío para los gobiernos en el futuro será la robotización del trabajo.
El brasileño Azevêdo aseguró hoy en un almuerzos en el Club Nacional de Prensa, en Washington, que adoptar políticas que busquen más proteccionismo “sería darse un tiro en el pie”, al perjudicar precisamente a los más vulnerables y pobres.
Azevêdo reconoció que el comercio puede “tener efectos negativos”, pero pidió alejarse de los discursos políticos en contra de la globalización, ya que “el proteccionismo es una manera muy cara a la larga de proteger empleos” y es un “chivo expiatorio para no hablar sobre políticas internas fallidas”.
El director de la OMC explicó así el “peligro” de tendencias proteccionistas como las expresadas por el candidato republicano a la Casa Blanca, Donald Trump, un abierto crítico a los acuerdos de libre comercio, o por su rival demócrata, Hillary Clinton, que se ha mostrado recelosa del Acuerdo de Cooperación Transpacífico (TPP).
“El proteccionismo nos va a hacer mucho daño”, advirtió, al tiempo que reconoció que se debe trabajar por una política comercial más inclusiva, ya que los beneficios de un mayor comercio internacional “no alcanzan a todos los que debería”.
Para Azevêdo el gran desafío de las políticas públicas no es la globalización, sino el impacto del rápido progreso tecnológico y la introducción de la robotización en todo tipo de gremios, que llevará a que algunos empleos desaparezcan por completo en un breve espacio de tiempo.
“La verdadera revolución económica será la robotización”, explicó el jefe de la OMC desde 2013, quien apuntó a claros ejemplos como la conducción automática de vehículos que cambiará la industria del transporte por carretera, o sectores como el manufacturero o servicios.
Para responder a estos cambios, que acabarán con empleos como los camioneros o los contables, el brasileño recomendó “políticas creativas” en educación, infraestructuras o reconversión sin alimentar “el eco del sentimiento contra el comercio global”.
El jefe de la organización internacional advirtió que 2016 puede ser el primero en 15 años en el que el comercio global crezca menos que el producto interior bruto (PIB) mundial, algo que responde, en parte, a movimientos políticos que buscan el proteccionismo.
Azevêdo recordó que ya es raramente posible entrar a la universidad con un plan de carrera en mente y que al salir de ella ese trabajo soñado aún exista o que las proyecciones de desarrollo profesional sean las mismas que cuando se comenzó a estudiar.
Que las piezas las fabriquen las multinacionales en China que a los obreros se les paga un poco de arroz al mes y ya aquí termina un robot, con eso se le puede poner hecho en España y ya se puede vender más caro, coste mínimo, máximo beneficio… y los obreros españoles, mientras, que se vayan a Francia a vendimiar unos meses al año o de camareros poniéndole cañas a los guiris, si no lo quiere hacer un panchito mas barato… este hombre es un iluminado.
Pues que les den, nos hacemos Amish y creamos nuestra sociedad desde cero.
Me encanta este tema porque da en el clavo del GRAN PROBLEMA. Hay un exceso de población en el mundo. En algunos países de África tienen cerca de 10 hijos por mujer. El problema es que estamos ante una nueva revolución industrial: la robótica. Quiere esto decir que cada vez hay más gente, pero cada vez se necesitan menos. OPCIÓN 1. Proteccionismo. Que no le gusta a este señor ni a las élites. Pero Japón es un ejemplo de un país que seguirá siendo Japón y en lugar de abrir la puerta a la inmigración masiva invierte en robots y… Leer más »
Claro, lo moderno, bonito y beneficioso es fabricar en Filipinas pagando salarios de 10 euros al mes y el producto venderlo en Europa a 500 euros por unidad. Si es que el proteccionismo es malo, malo, malo. Eso sí, si alguien pide “globalizar” el salario mínimo interprofesional, la Seguridad Social, el seguro de jubilación y accidente o el derecho a la educación, es porque somos un atajo de comunistoides anticuados. ¡Lo que hay que oir!
Cuándo desaparecerá la clase de plutócratas que se dedican a fastidiar la vida de millones de personas?
Si las empresas se modernizan tendrán que pagar para que la gente como mínimo pueda vivir decentemente, si no que hacemos díganlo” o repartan el trabajo 5 horas la jornada”
Lo primero expulsar a la ” masa de obra” que ha venido aquí a vivir del cuento o trabajar ilegalmente. Y luego expulsar a los inmigrantes que aunque si trabajaban legalmente se queden sin trabajo. Que cada palo aguante su vela, porque más paro y multitud de gente extraña y conflictiva nos lleva a la guerra civil.