Aficionados ingleses se enfrentan a la policía en el Puerto Viejo de Marsella, en Francia.

Por segunda noche consecutiva, la zona de bares del Puerto Viejo de Marsella se ha convertido en el escenario de una batalla campal entre aficionados radicales y la policía francesa, que ha vuelto a utilizar gases lacrimógenos para disuadir a los violentos.

Después de que la noche del jueves se produjesen los primeros choques entre la policía y un grupo de unos 200 aficionados ingleses, esta tarde, a partir de las 18.30, se reavivaron los disturbios, a los que se sumaron, primero, aficionados radicales rusos y, posteriormente, seguidores de la selección francesa.

Como 24 horas antes, la zona que congrega bares y pubs irlandeses, tomada por los hinchas ingleses que han desplegado allí sus banderas, ha sido el punto neurálgico de los altercados.

Cantando contra todo y todos (“Europa jódete, todos votamos la salida”, “que se siente quien odie a los franceses), consignas antialemanas y el consabido “ISIS, ¿where are you?”, que ya entonaron la noche anterior, la tensión ha ido creciendo con la llegada de los hinchas rusos.

Con la policía antidisturbios entre ambos grupos ha comenzado el lanzamiento de botellas y las primeras cargas, utilizando gases lacrimógenos. Al menos se declarado un pequeño incendio en un establecimiento y se han causado daños en otros, por el lanzamiento de sillas.

En medio del caos, la victoria francesa sobre Rumanía, con un gol de Dmitry Payet en el minuto 88, ha provocado que seguidores de la selección gala también se acercasen a la zona y se reactivasen los enfrentamientos.