Pedro Sánchez.

A. Martiarena.- Pedro Sánchez no tiene tirón ni entre los suyos. El desánimo por el ’sorpasso’ de Podemos ha llegado a tal punto en las filas socialistas que el partido de Ferraz ha tenido que contratar a militantes para poder hacer una campaña digna. La excusa que pone el equipo de Pedro Sánchez es que se ha seleccionado a una empresa para diseñar la “estrategia en la calle” de una manera más profesional. Pero la práctica revela que la citada empresa está “contratando centenares de militantes” para repartir propaganda electoral e incluso hacer bulto en actos del partido.

Ferraz sostiene que el pago a los afiliados no responde a la “desmovilización” que detectan los socialistas en sus filas sino que es una estrategia diseñada desde el principio porque permite tener una mayor presencia que si solo se depende de voluntarios, según explica la dirección.

La situación no es nueva. De hecho, uno de los actos que el PSOE preparó hace 15 días en Madrid sufrió un cambio de ubicación de última hora celebrándose finalmente en el Pabellón de la ONCE en Duque de Pastrana. Un auditorio en el que sólo caben unas “700 personas apretadillas”. “Es lo que tiene maltratar y ningunear a la militancia madrileña”, como señalan desde el entorno del partido. “Y no solo eso, algunos actos directamente se han cancelado por las nulas expectativas de asistencia”, sentencian.

La pérdida de fuelle del PSOE es un hecho tanto entre la militancia como entre los electores. El descenso, en toda la geografía española, ha sido significativa durante las dos últimas elecciones. A nivel municipal, en 2011 y 2015 los socialistas han visto reducido tanto el número de votos como su porcentaje de voto en 7.899 municipios respecto a 2008. Teniendo en cuenta que en España hay 8.122 municipios, el PSOE ha perdido apoyos en el 97,25% de las localidades.

Los militantes seleccionados trabajan desde el 25 de mayo y hasta el día 24 de junio a sueldo de la empresa Omnius Intelligence. Las tareas se centran en “informar sobre el programa electoral, tanto en la calle como en el puerta a puerta y colaborar con la realización de actos electorales”. Y el sueldo por la jornada completa -ocho horas de lunes a domingo “con los tiempos pertinentes de trabajo- son 1.159,72 euros.

“Esto no había pasado nunca”, insisten fuentes de la militancia en Madrid. “De toda la vida estas tareas se hacen por agrupaciones y con militantes voluntarios. Y lo peor de todo es que estamos en números rojos. Pedro Sánchez se está gastando lo que no es suyo y lo que no tenemos. Quien llegue después se va a encontrar un agujero negro económicamente hablando”, matizan.