Ramiro González.- “Si quieres robar en mi ciudad has de pagar por ese privilegio”. Son los felices años veinte, y estamos en la ciudad de Atlantic City, en Nueva Jersey. Llamada el “Patio de recreo del mundo”. ¿Por qué? Pues porque se incumplía la ley seca, había juego y había prostitución. Nos centramos en un hombre en concreto, en el tesorero del Partido Republicano, Enoch “Nucky” Thompson, que es el que dirige la ciudad. En sus propias palabras: “Cuando yo vivía bien, todos vivían bien”. Su generosidad para con los demás era legendaria, aunque su fortuna se haya hecho con los litros de alcohol vendidos y con el juego.

Esta serie, producida por HBO y el director de cine Martin Scorsese, nos brinda un fiel y excelente retrato de la época. Los creadores de la misma, cogieron la idea de un libro del mismo título, escrito por un juez de Nueva Jersey llamado Nelson Johnson, que a modo de reportaje, nos cuenta la historia de la ciudad hasta los tiempos más actuales. El creador de la serie, Terence Winter, prefirió en todo momento coger algunos aspectos reales del libro pero optó por continuar la línea marcada por Scorsese, de hacer una historia de carácter ficticio, de esa manera, los guionistas tienen más libertad creativa. El actor elegido para interpretar al tesorero Nucky es Steve Buscemi, que ha sido nominado a los Globos de Oro por su papel.

Gracias a esta serie, podemos estar seguros de aquella máxima del Padrino, de que “la política y el crimen, son la misma cosa”. Es una serie muy bien realizada y escrita que hará las delicias de los amantes de los buenos productos televisivos. Actualmente hay dos temporadas, la tercera en producción, y la primera ya se puede encontrar en DVD y blue ray. Recomiendo sin duda que todos aquellos que no la hayan visto lo hagan. Ahora que llega el verano, y muchas de las series de tv se acaban, sería bueno hacer acopio de unas cuantas para poder disfrutarlas durante las vacaciones.

En la próxima entrega, analizaré con detenimiento otra gran serie, que nos refleja la realidad social de la ciudad de Baltimore llamada “The Wire”, una serie que rompe muchos mitos, entre ellos el de los “pobrecitos negros” americanos. Si los negros tienen un enemigo, es precisamente el de la discriminación positiva, pero esto tendrá que esperar a la siguiente entrega.