Oskar Freysinger, vicepresidente del Parlamento de Suiza: “La Unión Europea se ha convertido en un barco borracho”
El vicepresidente del Consejo Nacional de Suiza (Parlamento) Oskar Freysinger, alerta sobre la criminalidad que sufre Europa, defiende la adopción de medidas en favor de la cultura y el estilo de vida tradicional de su país, advierte sobre la islamización del viejo continente y compara a la Unión Europea con “un barco borracho”.
-¿Qué medidas debería adoptar Suiza para proteger su patrimonio cultural y su estilo de vida tradicional?
?Ante todo, hay que abandonar los acuerdos firmados en Schengen y en Dublín. Estos acuerdos abren el camino a la importación del crimen. Esta cuestión es urgente. Segundo, nosotros ya trabajamos en esto, con la circunstancia de que incluimos aquí cuestiones relativas a Schengen, y exigimos poner bajo control de la nación los flujos inmigratorios. En el momento en que firmamos los acuerdos bilaterales sobre un intercambio libre, perdimos el control y nuestra frontera se convirtió en un colador.
-¿Supondría cerrar el país la aplicación de esas medidas?
-No exhortamos a cerrar el país. Exhortamos a una valoración correcta de torrentes migratorios desde el punto de vista de su origen, carácter, calidad, etc. Queremos resolver esta cuestión autónomamente, sin la UE que, como me parece, ya queda a la zaga de los acontecimientos. Si queremos conservar Suiza, es cuestión de primer orden. La UE se ha convertido en un barco borracho. Veíamos cómo se decidía la crisis griega. Veíamos cómo los acólitos de los bancos norteamericanos comenzaron a dirigir los asuntos en Grecia e Italia. Vemos cómo se trata a Hungría que pretende buscar su propia vía. Según la última encuesta de opinión pública, el 81 % de los suizos hoy votarían contra la UE.
-¿Teme usted una Europa islámica?
-Es un riesgo posible si no se toman medidas ahora. Los helvéticos ya hemos sometido a plebiscito algunas importantes decisiones sobre la inmigración.
“Vemos cómo se trata a Hungría que pretende buscar su propia vía”
Cuando hace unos meses los interlocutores de la UE tradujeron la nueva constitución húngara (contra el mundialismo y por su soberanía nacional y cultural) rápidamente se pusieron manos a la obra en clara consonancia con la oligarquía financiera internacional para ponerle palos en las ruedas al único bastión tradicionalista al norte de los balcanes. Hungría bien vale una misa
¿Polonia no lo es? ¿Dejó de serlo cuando su presidente murió en ese famoso accidente de avión?
Con dos cojones. Y los europedorros fomentando el cancer islámico y demás.
Y aquí con el moñas Rajao o en su defecto Rubalcaba el siniestro.
Que depresión..¡Acojanme como refugiado !