El exdirector general de Trabajo de la Junta de Andalucía Francisco Javier Guerrero, imputado en el caso de los Expedientes de Regulación de Empleo (ERE) fraudulentos, otorgó una ayuda de 125.028 euros a la madre de su chófer, destinada a solventar las deudas de una empresa de su hijo.

El chófer Juan Francisco Trujillo, en una declaración policial a la que ha tenido acceso Efe, dice que en los años 2006 y 2007 trabajaba como conductor de Guerrero y éste le vio preocupado, por lo que “se interesó por su estado” y entonces le contó que su empresa Lógica Estratégica Empresarial estaba “acuciada por las deudas”.

Un mes después, Guerrero le llamó a su despacho, le pidió el número de una cuenta bancaria de una persona mayor de edad y él facilitó el de su madre, que en realidad “desconoce todo sobre la póliza”.

Según su declaración, un mes después Guerrero lo volvió a llamar y el 18 de abril de 2007, en el propio despacho del exdirector general, Trujillo “suplantó” la firma de su madre en la póliza, tras lo cual empezó a recibir dinero, que su madre retiraba y le entregaba en su totalidad.

La juez de instrucción 6 de Sevilla ha entregado hoy a las partes personadas la declaración tanto de Trujillo como de su madre, destinada a preparar la declaración como imputado del chófer, prevista para el próximo 20 de marzo.

Además de esta ayuda, Trujillo recibió en 2004 dos subvenciones de 450.000 euros para empresas de su propiedad y parte del dinero se lo devolvió a su jefe o compró cocaína y se lo gastó en “fiestas y copas”, según su declaración ante la Policía de Andújar (Jaén), donde reside.

En las declaraciones notificadas hoy, tanto Trujillo como su madre declaran a la Policía en Sevilla, y Estrella B.G. afirma que “su hijo le pidió si podía ingresar algún dinero en su cartilla” y ella lo autorizó, aunque sin saber de dónde provenía el dinero. La mujer “no sabe nada de ninguna póliza” y lo único que cobra es una jubilación de 510 euros, según su declaración.