Morbo y expectación en la localidad gerundense de Salt por la presencia del presidente de Plataforma per Catalunya y cabeza de lista al Congreso por Barcelona, Josep Anglada, que no decepcionó a nadie. “Amigos y amigas de Salt, ya estoy aquí otra vez y estaré las veces que Salt me necesite, por más que le moleste al alcalde Torramadé, a Iolanda Pineda y a toda la casta podrida y parasitaria de políticos sinvergüenzas que han convertido Salt en un auténtico polvorín”, fueron las primeras palabras que pronunció el líder de los identitarios catalanes en el auditorio Coma Cros, abarrotado de público.

A continuación, Anglada aprovechó la realidad social que vive Salt para defender todo un programa de intenciones. “He entrado en Salt con el coche y hasta llegar aquí he sentido pena y tristeza, desazón y además vergüenza. No me gusta el paisaje de la multicultura, no me gusta entrar en un pueblo catalán y no saber si estoy en Cataluña, en Afganistán o en Irak”. Añadió que “el despropósito total de la multicultura sólo trae robos, violaciones, delincuencia e inseguridad ciudadana, que sufre siempre la gente autóctona”.

Entre vítores y gritos de “president”, el vicense inquirió al público asistente: “¿Os habéis fijado de qué nacionalidad es la gran mayoría de delincuentes que salen en las crónicas de sucesos? Estáis siendo víctimas de la multiculturalidad y muchos medios ya omiten la nacionalidad de los delincuentes e incluso la casta quiere imponer una ley para esconder la procedencia de los delincuentes, para así seguir vendiéndonos su cuento chino de la integración”.

Anglada señaló que “la reconquista de Cataluña empezará por Salt”, al considerar que “si liberamos a Salt del islamismo y la inmigración, será una victoria no sólo para vuestra ciudad, sino también una victoria simbólica que afectará positivamente a toda Cataluña”.

Por último, el vicense se comprometió a retornar a Salt “tantas veces como haga falta, a pesar de los traidores, los tránsfugas y a los alcaldes corruptos que compran a indigentes políticos por un plato de lentejas podridas”.

La PxC lamentó al finalizar el acto que “la nota discordante, como siempre, la protagonizara un grupo de perroflautas cachorros de Coscubiela que intentó sin éxito boicotear el acto libre y democrático de nuestro partido”.

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