Otro ‘hat trick’ de Messi pone al Barcelona en octavos y el Valencia gana al Bayern Levekusen y sigue vivo
El FC Barcelona ha firmado una importante victoria (0-4) ante el Viktoria Plzen, en el duelo correspondiente a la cuarta jornada de la fase inicial de la Liga de Campeones, guiados de nuevo por un Messi estelar que recuperó esta vez el olfato goleador en Europa con un triplete que certifica el pase culé a octavos de final, dependiendo de sí mismo para ser primero del grupo H tras el empate del Milan ante el BATE (1-1).
En un partido con números históricos para el Barça, 200 partidos para Guardiola como técnico, 202 goles de Messi y récord de imbatibilidad culé para Víctor Valdés, el campeón de Europa selló, con 10 puntos, su pase para octavos de final de la máxima competición europea. Además, el Milan le dejó el primer puesto ‘en bandeja’. Por su parte el Plzen se despide prácticamente de sus opciones de seguir en Europa.
A pesar del resultado, los locales pusieron las cosas difíciles al Barça, en especial en los primeros minutos. Los de Pep, fríos en ambos sentidos, fueron sobrepasados por la velocidad y las ganas de hacerlo bien del Plzen. De hecho, Valdés salvó, además de su récord, el tanto de los locales en un mano con Petrzela en el minuto 16. Mientras, Thiago y Fábregas intentaban hacerse con el centro del campo y asistir a Cuenca, Adriano y Messi. Una delantera peculiar. El ex del Arsenal tuvo la primera ocasión clara para el Barça, y poco después, con los de Guardiola más abiertos y desperezados, llegó el punto de inflexión. Messi es trabado en el área y el árbitro señala la pena máxima y la expulsión de Cisovsky. El argentino no perdonó en la transformación y abrió la lata para tranquilidad de los suyos y suya propia, ya que volvía a sumar en Europa.
El gol en contra y la expulsión obligó al técnico del Plzen a cambiar su once y retrasar las líneas, sin renunciar a la velocidad en sus contras, pero el Barça ya controlaba el ritmo de juego para evitar sorpresas. Cuando ya se llegaba al descanso, Messi se plantó en la frontal tras una pared con Adriano para poner el 2-0. El gol 201 de Messi en el primer equipo culé.
La segunda mitad parecía un castigo para el conjunto local, pero no se lo tomaron así. A pesar del peligro blaugrana, el conjunto checo se mantuvo con seriedad durante todo el acto para dar la cara ante un rival de tal entidad y más en casa. De hecho, no paró de correr y dispuso de ocasiones para maquillar el resultado, pero faltó el acierto en hombres como Petrzela.
Por su parte, el Barcelona siguió a lo suyo, Fábregas tuvo el tercero nada más salir, y las ocasiones llegaron desde todos los frentes. Cuenca, inspirado, no cejaba en su intento de perforar por la banda y Messi pedía la pelota en búsqueda de otro triplete, con tiempo también de asistir magistralmente en varias ocasiones. Los locales empezaban a bajar los brazos y los últimos minutos, en los que el Barça no suele tener piedad, podían ser interminables para los checos. Ante el vendaval, Fábregas hizo el tercero tras una gran asistencia de Cuenca desde la banda, y Messi, que al principio de la semana estaba en crisis goleadora, cerraba el marcador con el cuarto, el tercero de la noche y el sexto de la semana, de momento.
VALENCIA, 3 – BAYER LEVERKUSEN, 1
El Valencia ha vencido por 3-1 al Bayer Leverkusen en la cuarta jornada de la Liga de Campeones con goles de Jonas, Soldado y Rami, con lo que se mantiene vivo en la competición y depende de él mismo para pasar a la siguiente ronda. El conjunto blanquinegro disputaba el primer ‘match-ball’ de los tres que le quedaban en la ‘Champions’ y lo solventó con más acierto que calidad, ante un equipo alemán que fue de más a menos. El Valencia se queda tercero del grupo E con cinco puntos, uno menos que el Bayer Leverkusen que tiene seis, mientras que el líder es el Chelsea con ocho puntos tras empatar contra el Genk a domicilio.
El sueño de todo entrenador es que su equipo marque a los diez segundos de un partido en el que el equipo se juega la vida en la ‘Champions’. Eso fue lo que hizo el brasileño Jonas después de aprovechar un error en el despeje del portero Leno. El brasileño adelantó al Valencia con un tiro colocado a la base del poste cuando muchos aficionados todavía no habían ocupado su asiento. El Valencia salió motivado y con intención de morder desde el inicio. Prueba de ello fue el tanto de Jonas, que de forma increíble no es el más rápido de la Liga de Campeones.
El holandés Roy Makaay le marcó al Real Madrid un tanto más rápido cuando militaba en el Bayern Munich en la temporada 2007. El tanto incrementó la motivación de un Valencia bien guiado por ver Banega. El argentino se ha convertido en el motor del conjunto blanquinegro y cuando muestra su mejor versión el equipo lo nota. El Bayer Leverkusen apareció al cuarto de hora con un lanzamiento de muy peligroso que el portero valencianista Diego Alves desvió.
Los problemas para el Valencia tuvieron como origen la lesión de ver Banega. El argentino se lesionó en la rodilla derecha y abandonó el terreno de juego en el minuto 23 envuelto por las lágrimas. Con la lesión de Banega, el Valencia perdió el control del partido y gran parte de la posesión. Emery le dio las riendas del equipo a Tino Costa, pero el equipo no funcionó como antes. Mientras, el Bayer Leverkusen había llevado el partido a su terreno: la lucha cuerpo a cuerpo y a tirar de músculo. Ahí el Valencia perdió mucho y prueba de ello fue la jugada del gol del empate. Corría la media hora y una jugada hilvanada con potencia y calidad por la banda izquierda acabó con un centro de Ballack que remató de cabeza Kiessling. El tanto del equipo alemán, unida a la lesión de Banega, fue un mazazo para las ilusiones valencianistas y eso que todavía quedaba una hora de partido.
El equipo se bloqueó y salió de la misma forma después de pasar por el vestuario. El Valencia se mostró muy estático y nadie tiró de galones para despertar a un equipo que parecía noqueado. El partido se puso totalmente de cara para los visitantes. Con el empate estaba clasificado para la siguiente ronda a falta de dos partidos para concluir la fase de grupos. El Valencia no perdió la confianza y en una jugada de coraje y fuerza de Mathieu por la banda izquierda acabó con un centro precisó que remató Soldado a bocajarro. El tanto del Valencia llegó cuando el Bayer tenía totalmente controlado el encuentro y los de Emery no practicaban un juego vistoso.
Con el 2-1, el Valencia tenía ante sí la enésima oportunidad de demostrar que sabe cerrar los partidos, algo que no ha demostrado hasta la fecha esta temporada. El que dio un paso al frente para certificar y cerrar el encuentro fue Adil Rami. El omnipresente defensa francés apareció en el área para rematar un córner cuando quedaba un cuarto de hora para acabar el encuentro. El Valencia ahora sí supo dormir el partido y se adjudicó una victoria que le hace recuperar el pulso en la Liga de Campeones. El equipo que entrena Unai Emery está obligado a hora a ganar al Genk en Mestalla dentro de tres semanas.