El Bribón de don Juan Carlos se adjudica su sexta Copa del Rey
La Copa del Rey de vela concluyó ayer en la bahía de Palma, en cuyo club náutico se reunió toda la Familia Real, ofreciendo a don Juan Carlos la doble satisfacción de recibir el homenaje del mundo de la alta competición y ver al Bribón despedirse con su sexto triunfo en esta prueba.
El príncipe de Asturias y la infanta Cristina acudieron juntos al Náutico, para embarcar por última vez al frente de sus respectivos veleros, el Hispano y el Aifos, con los que intentaron disputar la victoria en la categoría IRC-A al Bribón que en tantas ocasiones ha patroneado el rey. Ya en alta mar, doña Cristina recibió los ánimos de su hermana, de su esposo, Iñaki Urdangarín, sus cuatro hijos y los dos de la infanta Elena, que se acercaron al Aifos a bordo de la lancha motora Somni, para seguir de cerca la competición.
Es el segundo año que don Juan Carlos no embarca en el Bribón, pero en esta ocasión tuvo la oportunidad de entregar a su armador, amigo y tradicional compañero de navegación, José Cusí, la Copa con la que este barco, en sus sucesivas reencarnaciones, culmina una larga trayectoria de éxitos en la primera regata del Mediterráneo, antes de despedirse en septiembre de la alta competición.
La Princesa de Asturias también fue protagonista en la jornada de clausura del torneo, ya que acudió a pie al Club Náutico de Palma para esperar la llegada del Príncipe al frente del Hispano y festejar junto a don Felipe el triunfo del Bribón.
Doña Letizia se acercó directamente al embarcadero para recibir a su esposo, que la ayudó a subir a bordo de su barco, finalmente quinto entre los veleros participantes en la categoría IRC-A, donde saludó a don Felipe con un beso y conversado con él y sus compañeros de tripulación mientras esperaban la llegada del ganador de la XXX Copa del Rey de vela.