Las autoridades de Brasil confirmaron el descubrimiento de una tribu desconocida compuesta por unos 200 miembros en la selva amazónica. Las primeras sospechas sobre la existencia de una tribu desconocida surgieron en primavera, cuando fueron detectados por satélite unos grandes claros en la jungla, cerca de la frontera con Perú. Las fotos aéreas tomadas en la zona desde un avión confirmaron la suposición de los científicos. La tribu vive en cuatro grandes cabañas cubiertas de paja y cultiva plátanos, cacahuetes, maíz, además de otros cultivos. Los científicos presuponen que los indios hablan una lengua del grupo pano.

La política de Brasil prohíbe en estos casos la invasión de las tierras de los indígenas para preservar su autonomía y no contagiarlos con ninguna enfermedad contra la que su organismo podría no estar preparado. Los indígenas recuperaron en 1988 el derecho a habitar sus tierras en paz, a salvo de las agresiones contra su entorno, y desde ese momento casi el 22 % de la selva amazónica permanece poblada con ellos.

En el lugar llamado Vale do Javari habitan por lo menos 14 tribus diferentes. Su cultura e incluso su vida se ven constantemente amenazadas debido a la pesca, la caza, la tala ilegal de bosques y el narcotráfico. A pesar de estos problemas la mayoría de los grupos indígenas de Brasil conserva su lengua y sus tradiciones.