Un historiador holandés abandera la ofensiva contra Wilders y su lucha contra la islamización del país
Martijn van Tol .- ¿Qué tienen en común una canción punk holandesa y una conferencia sobre la Segunda Guerra Mundial? Ambas han sido censuradas porque son críticas sobre el partido anti-islam de Geert Wilders, el Partido de la Libertad. ¿Se derrumba la libertad de expresión y opinión en Holanda? No, si depende de Thomas vor der Dunk (en la imagen).
El historiador cultural Von der Dunk fue invitado a dar una conferencia en honor del héroe de la resistencia en la Segunda guerra Mundial, Willem Arondeus. El objetivo del discurso es subrayar la relevancia de la Segunda Guerra mundial para el presente.
Von der Dunk se proponía criticar al partido de derecha PVV porque, en su opinión, es discriminatorio y atenta contra el estado de derecho. “En este momento, por primera vez desde la ocupación de los alemanes, tenemos un poderoso partido político que ataca al estado de derecho”.
Kipas o sotanas
Von der Dunk: “Observen la propuesta del PVV de prohibir que las mujeres musulmanas viajen con el velo en el autobús. No prohíbe kipas o cuellos de sotanas. Es muy obvio que restringe solamente la manifestación externa de una religión y en ese sentido contradice la libertad de religión. Hay muchos ejemplos en los que los musulmanes son señalados sistemáticamente como sospechosos de constituir una quinta columna del califato mundial. Y eso recuerda la manera en que los judíos fueron convertidos en sospechosos, en los años 30, de ser una quinta columna de un gobierno judío mundial”, sostiene Von der Dunk sin ruborizarse.
La conferencia ha sido cancelada. Según la organización, porque era “demasiado política”. Sin embargo, según Von der Dunk, es imposible evitar el tema político en un discurso sobre cuestiones sociales: “¿Tendría que haber pretendido que el PVV no existe? Es como si fuera a visitar a mi vecina, encuentro un elefante en la sala, y le dijera: ‘qué bonito hamster tiene usted’”.
Bigote y raya
No sólo el discurso de Von der Dunk, también una canción punk ha sido censurada y no podrá ser interpretada en un festival en honor a la liberación. En el refrán del controvertido número, se hace referencia a Geert Wilders: ‘Mussolini de los Países Bajos / Si llevaras bigote y raya en el pelo / te podría comparar con Mi Lucha.” “La libertad de expresión es importante para el festival de la liberación”, explicó un portavoz, “pero no se deben aumentar las contradicciones”.
Según Von der Dunk, la verdadera razón de la suspensión de su discurso es que el PVV había anunciado presentarse con una nutrida delegación para provocar desorden durante la conferencia y por lo tanto la organización sucumbió bajo el peso de esta ‘intimidación.
Justicia telefónica
Von der Dunk también se proponía recalcar el supuesto peligro que el PVV significa para la independencia del poder judicial. “Wilders ha declarado que quiere un nombramiento temporal de los jueces, de modo que cuando, en su opinión, no demuestren suficiente rigurosidad, puedan ser inmediatamente enviados al servicio social (para un subsidio de desempleo). Esta situación recuerda a la Italia de Berlusconi, o más aún, a la Rusia de Putin. Es lo que llamamos “justicia telefónica. Que el derecho no se aplica de manera independiente sino que desde arriba se impone la orden de hacerlo de otro modo”.
El propio Wilders, el líder del PVV, se refiere sistemáticamente al Corán como una variante de Mi Lucha, y maneja el término “islamofascismo”, señala Von der Dunk. “No debe medir con dos varas cada vez que recibe una réplica”.
Oportunismo
Según Von der Dunk, el PVV no es censurado porque el gobierno holandés precisa su apoyo para lograr una mayoría. “Y así queda expuesta la cultura pólder holandesa y su oportunismo, en todo su esplendor”.
El propio primer ministro dice que “no importa si votas por Wilders o por mí, con tal de que yo obtenga la mayoría. Si el PVV comienza a refunfuñar cada vez que recibe críticas, entonces los partidos de la coalición viran en redondo por temor a un enfrentamiento”, señala.
Von der Dunk también ve un paralelismo aquí con el pasado. “Dado que los partidos quieren evitar los conflictos, cuando la cuestión se torna compleja desvían la mirada. Eso también se vio en los años 30. Una típica política de miopía cobarde.”
El tema es bastante confuso. Si Wilders es quien está constantemente censurado y -que yo sepa- imputado por racismo, no comprendo lo que se dice aquí, de que él o su partido consiga censurar a ese de cara de loco.
Son graciosos, los tergiversadores.