El anuncio de huelga realizado por los sindicatos de Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (Aena) cayó ayer como un jarro de agua fría que congela las buenas previsiones para la Costa del Sol que facilitaron los operadores alemanes en el primer día de la Bolsa Internacional de Turismo (ITB) de Berlín y que deja en el aire las expectativas de recuperación del sector.

El despejado panorama que pintaban los profesionales, ante el dinamismo sin precedentes de las ventas en Alemania para viajar a los destinos malagueños y andaluces, quedó ensombrecido con la convocatoria de huelga de 22 días, que tiene previsto su inicio en la próxima Semana Santa. Las reacciones corrieron por la Messe de Berlín a mayor velocidad que hasta ese momento lo hacían las noticias de incrementos de llegadas de turistas de unos y otros operadores. La respuesta general del sector y de los responsables de turismo que se dieron cita en esta feria fue que el daño está hecho sólo con la advertencia de movilizaciones. Las primeras cancelaciones en mercados estratégicos se producían escasas horas después de que los medios internacionales dieran la noticia.

El secretario general de Turismo, Joan Mesquida, mostró su confianza en que se reconduzca la situación y en el hecho de que la convocatoria se ha realizado con tiempo suficiente para poder buscar una salida. Sin embargo, confirmó que en Alemania se habían producido unas pocas cancelaciones. «Tengo absoluta confianza en el Ministerio de Fomento, que ha resuelto conflictos similares, y estoy convencido de que habrá un acuerdo y que la huelga será desconvocada». Eso sí, pidió responsabilidad a los sindicatos y explicó que la privatización es parcial y que se hace con el objetivo de reforzar Aena y con garantías de que se mantendrán los empleos.

Estas primeras cancelaciones se producen en un momento en que operadores alemanes y destinos españoles, como Baleares, se plantean la posibilidad de que este verano se produzcan situaciones de ‘overbooking’ ante el ritmo de ventas histórico de paquetes vacacionales que se registra en un país que es el primero del mundo en gasto turístico y el segundo emisor de viajeros extranjeros a la Costa del Sol.

El consejero de Turismo, Comercio y Deporte, Luciano Alonso, aseguró ante la convocatoria de huelga que sólo el anuncio coloca a Andalucía, como al resto de destinos españoles, en una posición de debilidad frente a otras zonas turísticas que desembarcan en la ITB con más fuerza que nunca ante la fortaleza económica del país. Alonso aseguró: «Si no se soluciona pronto estaremos ante una situación dura en un momento en que mercados clave para la industria turística como es Alemania presentan unas expectativas muy atractivas. Es un duro golpe, un palo serio».

Apelar a la cordura

Además, explicó que seis de cada diez germanos confecciona sus vacaciones por su cuenta y ante el anuncio de una protesta así no se arriesgan a quedarse atrapados en un aeropuerto, simplemente descarta la opción de viajar a destinos con este tipo de amenaza. «Si nos ponemos en la piel de un turista nadie hace una reserva de cuatro o cinco días con una advertencia de protestas en aeropuertos para pasarse estas jornadas en una terminal», dijo. El consejero apeló a la cordura y destacó que es el turismo el sector que mueve la economía y que afronta 2011 con perspectivas de una clara recuperación.

El presidente del Patronato de Turismo de la Costa del Sol, Salvador Pendón, tras resaltar la magnífica posición en que se encuentra la Costa en Alemania, lamentó con rotundidad el daño que puede suponer para la Costa el anuncio de la huelga. «Nadie puede dudar de mi compromiso ideológico y de mi apoyo a todas las reivindicaciones de los trabajadores, pero lo que no se puede hacer es lo que han hecho los empleados de Aena. El daño a la Costa es enorme. Ya ha habido cancelaciones. No se puede hacer un anuncio de estas características porque el efecto es siempre negativo. Cuando hablamos de cuestiones estratégicas para el país como es el turismo no se puede ser tan irresponsable. El único sector económico con signos de recuperación en la crisis es el turismo. El mercado alemán, por su situación socioeconómica era uno de nuestros primeros flotadores. ¿Qué ocurrirá ahora con los turistas británicos y alemanes que tenían previstas unas vacaciones esta Semana Santa?», se cuestionó Pendón.

Por su parte, el concejal de Turismo del Ayuntamiento de Málaga, Elías Bendodo, aseguró: «En las reuniones con operadores y agentes lo primero que preguntan es por la huelga. No entiendo como se puede hacer una cosa así. Se juega con el principal sector económico de España. Espero que el Gobierno sea capaz, aunque sólo sea por una vez, de arreglar el entuerto que se ha creado», afirmó. Bendodo insistió: «Es una pena que con las magníficas perspectivas que hay en este mercado este anuncio nos haya rebajado muy mucho las ilusiones, y, lo que es peor, las cifras. Me han dicho profesionales que ha habido cancelaciones por un importante montante económico. Espero que cuanto antes se solucione el asunto».

Advertencia

Los empresarios estaban indignados con la convocatoria de huelga. Sin tiempo para saborear los fuertes incrementos de ventas de viajes en Alemania para los destinos españoles se pusieron manos a la obra para enviar comunicados de repulsa. El presidente de la Confederación de Empresarios Hoteleros y Alojamientos Turísticos (CEHAT), Juan Molas, apeló al sentido de la responsabilidad y advirtió, mientras no paraban de llegarle mensajes al móvil sobre las informaciones alarmistas de la prensa británica, de que hay infraestructuras como los aeropuertos que deben ser declaradas servicios esenciales porque de ellos depende la movilidad de los ciudadanos, no sólo de los turistas. «Es increíble el daño irreparable que sólo el anuncio de huelga ha provocado. Hay medios británicos que ya advierten de que millones de turistas podían quedar atrapados en los aeropuertos españoles. Es incomprensible cómo se puede dar lugar a que se desencadenen estas situaciones», aseguró.

La patronal hotelera advirtió: «la economía española y la industria turística no pueden permitirse una nueva amenaza contra uno de los principales motores económicos de España. Las expectativas de optimismo pueden verse truncadas ante esta huelga. El anuncio y la prolongación de esta situación ponen en serio peligro la imagen y el atractivo de España como destino turístico en un momento en que el sector hotelero por fin veía signos de recuperación». Los empresarios recordaron que la Semana Santa es el termómetro de la temporada alta y que el pasado año superó el 80% de la ocupación hotelera.