El modelo educativo española hace aguas y demuestra grandes desigualdades en la enseñanza impartida en diferentes regiones de España. El Centro Democrático y Social (CDS) considera que esa conclusión del informe PISA que ha sido criticado por la práctica totalidad de la comunidad educativa hace imprescindible repensarse el modelo en su conjunto, ya que los centristas consideran que el problema es de fondo.

Ante esta situación el CDS propone unificar el sistema, para evitar lo que consideran “la barbaridad de tener 17 sistemas educativos y niveles diferentes dentro de nuestra nación”, aumentar la inversión pública en educación, adaptar las enseñanzas a las necesidades del mercado laboral, y atender la diversidad de niveles educativos para que quienes van más retrasados no resten mejoras a quienes tienen más capacidades o demuestran mayor esfuerzo y generalizar las llamadas escuelas de padres para que estos se impliquen en la enseñanza de sus hijos, desde donde se apoye el trabajo de los profesionales de la educación.

Desde el CDS señalan que el modelo educativo español está fuera de la realidad laboral lo que supone una de las mayores causas de la falta de competitividad de nuestras empresas al alejarnos de la gestión del conocimiento. Los centristas apuntan que “es absurdo que un joven tras pasar años en la universidad llegue al mercado laboral y tenga que formarse de nuevo prácticamente como si partiese de cero, y eso sucede en muchas carreras, o que para necesidades permanentes del mercado de trabajo no existan titulaciones oficiales que cursar”.

Aumentar la autoridad de los profesores y dotarles de medios para dirigir correctamente las clases y posibilitar la conciliación de la vida laboral y familiar.

El CDS también considera necesario que se refuerce la autoridad de los profesores en clase dotándoles de sistemas disciplinarios que impidan que los alumnos díscolos puedan alterar el ritmo de las clases y agilizando los procesos de identificación, reconducción o sanción en los casos necesarios.

Para el CDS uno de los grandes problemas nacionales que hay que abordar de una forma definitiva en España es la conciliación efectiva de la vida laboral y familiar de los padres. En la educación de un niño es tan importante la educación que se recibe en el colegio, como el seguimiento, la atención y el cariño en casa. En ese sentido señalan que “todos los días tenemos que ver chavales que se están criando prácticamente solos porque a sus padres les es imposible conciliar el trabajo con la familia, y a eso hay que darle una solución social antes de que el problema sea incontrolable”.