Ante la profanación de Franco, ¿dónde está la Patria?, ¿dónde el español? Acaba la vida y empieza la supervivencia
Por Laureano Benítez Grande-Caballero.- En la última vuelta de la carrera de cuadrigas que se estaba celebrando en el circo de Jerusalén, en el año 25, el carro del tribuno Mesala trastabilló su rueda delantera derecha con el carro que conducía Judá Ben-Hur, y, como consecuencia del choque, el tribuno salió despedido por el aire, cayendo estrepitosamente en la arena. Aferrado a las riendas de su cuádriga, Mesala fue arrastrado un largo trecho, hasta que los caballos se detuvieron. Cuando fueron a recogerle, el antaño orgulloso tribuno era una piltrafa humana, un amasijo sanguinolento.
No sé muy bien por qué, esta escena de la legendaria película «Ben-Hur» ―mi favorita, lo confieso―, es lo que me ha estado rondando estos días, en la espera de la sentencia del Supremo sobre la exhumación de Franco.
Hago constar que ante esta aberración luciferina no es odio lo que siento por los execrables profanadores, porque mi carácter y mi formación cristiana me impiden sentir ira, rabia, rencor o sentimientos de venganza contra esta blasfemia, pero el hecho de que no pueda ni quiera desear ningún mal a la jauría profanadora no es óbice para que narre las escenas aterradoras que he visto en mi Patmos particular, que no son ninguna amenaza para todos los que han colaborado en la abyecta profanación, sino una advertencia de las consecuencias que tendrá su abominable fechoría: porque ―como dije en un artículo anterior― ojo por ojo, diente por diente, tumba por tumba… Una advertencia para que recapaciten, para que comprendan que sus acciones tendrán consecuencias.
No soy ni profeta, ni vidente, pero puedo asegurar que he visto la escena de Mesala tirado por los caballos, pero con otros protagonistas, y con la diferencia de que éstos ya estaban muertos cuando eran arrastrados por calles dantescas, en medio de un Armageddón fatal, con calles incendiadas por la cola de un cometa maléfico, que barre las ciudades con una inmisericorde lluvia de fuego, de horror y terror.
Y vi cómo se rasgaba el velo del palacio de la Monkloa de parte a parte, cómo se desmoronaban las columnas de un Kongreso donde ningún diputado se opuso a la profanación, cómo se desmochaban las altas torres de una Conferencia Episcopal que tampoco dijo una sola palabra de apoyo al Caballero de la Suprema Orden de Cristo, el paladín que salvó a la Iglesia Católica de su exterminio total… Ni Sodoma conoció una hora de espanto como ésta, ni el Vesubio fue capaz de arrojar tanta muerte…
En ese día se abrirán grietas humeantes en el suelo, y en medio de los vapores sulfurosos se verán las garras infernales desenterrando milicianos para llevárselos al Tártaro, arrastrados por los jinetes del Apocalipsis… milicianos kobardes, perdedores compulsivos, que demuestran su valor matando curas, violando monjas, incendiando iglesias y convento, alanceando momias, profanando cadáveres.
No, no siento odio, ―repito― sino una pena profunda, una lástima infinita por todos aquellos que han colaborado en un hecho tan abominable: los jueces, los políticos, los tertulianos, los periodistas, los izquierdosos, los obispos… y también por los borregomatrix de cerebro y alma planos a los que les importa una higa que se profanen los restos del hombre que construyó los pantanos cuya agua beben y riegan, las centrales eléctricas con las que se iluminan, los hospitales donde acuden para restablecer su salud, las casas y los pueblos donde no pocos españoles viven, y un inacabable etcétera.
Porque los culpables no son solamente quienes han tenido responsabilidad en esta execrable profanación, no… También estoy advirtiendo de las consecuencias de sus actos a la inmensa españolía abotargada, terracera, futbolera, cobarde e indiferente: miradme a los ojos, y decidme con sinceridad que a vosotros os da igual lo que hagan con vuestros muertos, que los usen para venganzas personales, para conseguir votos, para homenajear al Señor de las Moscas, a Moloch, a Baal, al mismísimo Lucifer, cuya carcajada estremecerá hasta la eternidad los campos y ciudades de España; decidme que no os importaría que saurones carniceros desenterraran a vuestros antepasados y los inhumaran donde a ellos les diera la gana; decidme que os daría igual que hienas rojas carroñearan con los huesos e vuestros padres y abuelos, que desenterrar y enterrar es un juego democrático…
Españolitos que bebisteis champán para celebrar vuestra victoria sobre el Generalísimo que os derrotó de forma aplastante; españolitos que votaréis a los partidos profanadores; españolitos sumidos en la catatonía de la indiferencia, de la kobardía, del pasotismo… ¿Acaso pensáis que os libraréis del juicio divino? ¿Acaso creéis que vuestros muertos descansarán en paz por siempre?
¿Cómo no sentir compasión por los que aúllan de placer ante el obsceno espectáculo de un cadáver profanado y mancillado, que gritan de alegría al ver a su enemigo desenterrado, mientras escupen babosos la palabra «democracia»? ¿Cómo no sentir misericordia de estos malhechores que sienten clímax inenarrables al bailar con momias, que chillan como tiorras perturbadas en pleno ataque histérico, porque les ponen las morgues y los tanatorios?
Porque serán juzgados en un Tribunal Supremo que está más allá de la bóveda celestial, en una Corte Suprema donde a los profanadores les cuelgan piedras de molino alrededor del cuello y los arrojan a un Valle que no es de los Caídos, sino de los Condenados; un Valle que es una «Gehenna» infecta donde van a parar los asaltatumbas, los destripacadáveres, los desentierrafrancos. Y allí no habrá paz, ni piedad, ni perdón…
En lo más profundo de la más oscura noche que vive España, mi Patria antaño nacionalcatólica transmutada en nido de víboras, en pasmosa Gomorra, en Babilonia hedionda, los demonios andan sueltos, se contonean por hemiciclos y tertulias, exhibiendo sus impúdicos atributos, sus risas sardónicas, que en el Armageddón se les congelarán en un rictus de horror: porque allí, en el Día del Juicio, no tendrán quien les defienda, quien les cierre los ojos; allí no habrá recurso de amparo posible, porque quien a aborto mata, a eutanasia muere; y quien a muertos desentierra, a profanación es desenterrado. Sí: es el karma, es la Ley del Talión.
Cuidado, cuidado con este abyecto boomerang que habéis arrojado contra la historia de España, contra la memoria del Caudillo que derrotó a vuestros antepasados de mono y mandil, contra los mismos cielos… porque volverá a vosotros implacablemente, y allí será vuestro llanto y vuestro rechinar de dientes.
¿Qué se puede decir de algo para lo que no hay palabras? ¿Qué se puede sentir por los humanos que aprueban abortos, eutanasias, profanaciones, igual que el día de mañana un pueblo absolutamente robotizado aplaudirá la pederastia y el canibalismo? ¡Nosotros, que hasta 1975 éramos la reserva espiritual de Occidente, y hoy somos la reserva luciferina del NOM!
Quizá la mejor manera de expresar el terror que las mesnadas de Monte Pelado están imponiendo en España sea recurrir a una paráfrasis de la carta que el gran jefe Seattle «Toro Sentado» escribió al presidente americano Franklin Pierce, en 1855:
«El Gran Jefe de Moncloa manda decir que desea desenterrar a Franco. ¿Cómo podéis profanar una tumba? Esta idea nos parece extraña. Mas ello no será fácil, porque esta tumba es sagrada para nosotros.
Sabemos que el hombre rojo no comprende nuestra manera de ser. Su insaciable apetito de venganza devorará España y dejará tras sí sólo un desierto. Trata a los muertos como si fueran cosas que se pueden mancillar, saquear y utilizar para conseguir votos…
No lo comprendo. Nuestra manera de ser es diferente a la vuestra. La vista de vuestras maldades hace doler los ojos al hombre inocente, al patriota.
Soy un patriota católico y no comprendo otro modo de conducta. Hace tiempo hubo miles de católicos y patriotas pudriéndose sobre las praderas y las calles, abandonados allí por el hombre rojo que les disparó desde un camión en marcha. ¿Qué es el hombre sin sus muertos? Si todos nuestros antepasados hubiesen desaparecido, el hombre moriría de una gran soledad de espíritu. Porque todo lo que ocurre a los antepasados pronto habrá de ocurrir también al hombre. Todas las cosas están relacionadas entre sí.
Vosotros debéis enseñar a vuestros hijos que el suelo bajo sus pies es la ceniza de sus abuelos. Para que respeten la Patria, debéis decir a vuestros hijos que la tierra está plena de vida de nuestros antepasados. Debéis enseñar a vuestros hijos lo que nosotros hemos enseñados a los nuestros: que la Historia es nuestra madre. Todo lo que afecta a la historia afecta a los hijos de nuestra Patria. Cuando los hombres escupen a sus muertos, se escupen a sí mismos.
Ahora pensáis quizá que sois dueño de nuestros muertos: pero no podéis serlo, porque solo pertenecen a Dios y a su familia. Causar daño a los fallecidos significa mostrar desprecio hacia su Creador. Si contamináis vuestra Patria, moriréis alguna noche sofocados por vuestros propios desperdicios, ahogados en vuestros propios vómitos.
Cuando los niños son abortados, los ancianos eutanasiados y los cadáveres profanados, ¿Dónde está la Patria?: desapareció; ¿dónde el español?: fuese; ¿Dónde el ser humano?: aniquilado.
Termina la vida y comienza la supervivencia.
Ay, benito caballerito, me haces reir como nadie! Eres un graciocillo desbordado. Diria que tendrias éxito en holliwood de no ser por lo penoso de tus peroratas. Saludos payasín.
Que mal reciben la VERDAD los mentirosos
Don Laureano, hace usted muy bien en no sentir ni rabia, ni odio, pues es lo que mayormente buscan desde hace 40 años la turba provocadora. Y luego dicen que la derecha, los fascistas son malos…Lo único que deberíamos hacer es buscar donde habitan los restos de Negrín, Largo Caballero o Carrillo, el sanguinario de Paracuellos y dejárselos de buena mañana en la puerta de Ferraz. Esa sería una muy buena contestación ante tan semejante ignominia. Un saludo.
Una vergüenza
Pero existe el efecto boomerang y los intentos de esta exhumación (aún no se ha llevado a cabo) están despertando a numerosos españoles que conocieron el tiempo de Franco y su calidad de Vida frente a esta porquera de sociedad democrática actual, pero que se hicieron a un lado a dormir y dejar hacer a lo progres. Ahora están despertando y “volveran banderas victoriosas…”
Sí, ya se ve cómo España se ha echado a la calle.
Sí, ya se ve cómo no se cabe en el Valle
Sí, ya se ve como asociaciones y partidos politicos llaman a la movilización.
Lo siento, pero nadie quiere que vuelvan las banderas victoriosas, excepto los abuelos y ex-militares que aquí se reunen.
No dan para una division.
Con un solo regimiento se os pone las pilas rápido, no es la cantidad, es la legitimidad y por supuesto la calidad
En cuanto al número, si es capaz de encontrar 2000/3000 hombres dispuestos a movilizarse por esta causa, y a realizar actos violentos contra el estado, me sorprenderá. En cuanto a la calidad, si es capaz que entre esos hombres haya una media de edad inferior a los 50 años, le prometo que me comeré mis palabras. Y cuando me las coma, sobre todo tendrá que felicitarse. Estará en camino de realizar un golpe de estado en un estado democrático de pleno derecho en la unión europea. Todo occidente le aplastará como a una simple cucaracha. Pero mientras es aplastado y… Leer más »
Ayer doña Pilar Gutiérrez y trece valientes lo hicieron…esto solo es el comienzo
Será que no tienen problemas reales que atender estos políticos. Así nos va 🙁
Para no sentir odio, ni ira, ni cualquier ambito negativo del alma debido a su condición de cristiano temeroso de Dios, bien le ha deseado todos los malos habidos y por haber a la gran mayoria de España, la que dice que es su patria. Puede que no se lo haya deseado, sino que solo haya avisado de las consecuencias…si eso le sirve para sentirse mejor, puede que al menos sea util para usted. Pero no ha pensado que quizas escribiendo articulos como este, incendiarios, apocalipticos, atronadoramente mitologicos, llamando a una justicia divina, muchos radicales podrían sentir la necesidad de… Leer más »
¿Cuantas mejillas espera usted que tengan para poner los Católicos?
Las que sean necesarias…¿no es eso lo que caracteriza la superioridad moral de la cristiandad?
A muchos tibios como creo que es Vd.lo que cree que salva, es poner siempre la otra mejilla,aun para los mismos demonios. Ignora seguro que Jesus vomita a los tibios,mas aun cuando no ha entendido nada de lo que el Sr.Laureano Benítez Grande-Caballero ha escrito,lo que hace es ADVERTIR a esta gente e intentar que razonen, inducirlos al bien, ante las plagas que segun la Biblia puedan llegar a sufrir y que sera sin duda lo que les vendra de parte de Dios si no se arrepienten a tiempo. Aunque sea imposible que demonios encarnados se arrepientan,merece la pena,- si… Leer más »
Habla por Cristo y la Iglesia como si hubiera nacido hace 20 siglos y estuviera aqui reencarnado…debería tener un poco mas de consideración, habla de personas. Y si se considera cristiano, el hecho de perdonar y compadecer debería estar entre sus principios mas primarios. En cambio, no. Practicamente pide la aniquilación de todos los que no son como usted: izquierdistas en general. Preguntese qué pensaría Dios si alguien fuera a plantearle tal atrocidad. Sé leer perfectamente. Visto como escribe usted, seguramente sepa leer mucho mejor que usted. Puede decir que el Sr. Laureano solo esta advirtiendo, pero lo que realmente… Leer más »
La Biblia,-PALABRA DE DIOS- sigue siendo la misma,NO desde hace 20 siglos sino desde que el Eterno creo la tierra y empezo a contarnos,dandonos leyes y mandatos.Y NO,no me he reencarnado,solo conozco bien la Biblia procuro obedecerla y ponerla en practica pues dificilmente se practicara algo que no conocemos mas que de oidas,como me temo que sea su caso. Desgraciadamente en su escrito Vd.llevado por no se que idea,resulta que judga a los cristianos malamente y perdona a los malhechores impenitentes.Ver para creer!! a no ser que su ideologia diste mucho de ser la de un cristiano,y que hasta este… Leer más »
Ya que conoces tan bien la Biblia, espero que estos versículos te suenen de algo: Proverbios 17:9: El que perdona la ofensa cultiva el amor; el que insiste en la ofensa divide a los amigos. Mateo 6:14: Porque si perdonan a otros sus ofensas, también los perdonará a ustedes su Padre celestial. Lucas 6:37: No juzguen, y no se les juzgará. No condenen, y no se les condenará. Perdonen, y se les perdonará. Mateo 18:21-22 (este tambien vale para Lancero): Pedro se acercó a Jesús y le preguntó: ―Señor, ¿cuántas veces tengo que perdonar a mi hermano que peca contra… Leer más »
Es Vd.tan lleno de orgullo y ciego,que es inutil decirle de nuevo que, DIOS SOLO PERDONA A LOS ARREPENTIDOS,y la palabra de Dios lo dice tan claro que no hay lugar a equivoco. ¿No saben ustedes que los injustos NO HEREDARÁN EL REINO DE DIOS? NO ERRÉIS; NI los fornicarios, NI los idolatras, NI los adúlteros, NI los afeminados, NI los que se echan con varones, NI los ladrones, NI los avaros, NI los Borrachos, NI los maldicientes, NI los estafadores, heredarán el reino de Dios. 1 Corintios 6:9,10 Mateo 7:6: “No deis lo santo a los perros, ni echéis… Leer más »
Parece que nadie se da cuenta, pero en el parlamento hay mayoria absoluta en cuando a sacar a Franco del valle.
Así es la democracia.
¿Y sabeis que? El día despues de que lo saquen, no habrá otra guerra civil. Podeis respirar tranquilos.
¡¡Todos los patriotas al Valle de los Caídos a impedir la profanacion del cadáver del Caudillo que salvó a España de la tiranía comunista!!
Doña Pilar Gutiérrez organizo ayer una protesta contra esta desfachatez y solo fueron 13 personas!!!!con esta unión de patriotas no vamos a ninguna parte
Magistral como siempre en sus apreciaciones, D. Laureano. Satán debe estar frotándose las manos para cuando llegue la hora de rendir cuentas a todos los que siguen sus pasos, a pesar de que ya hemos sido advertidos muchas veces de que a pesar de que Dios desea la salvación de todas las almas (oración de Fátima), el hombre va hacia su perdición. Ya lo advirtió primero Nuestra Señora de las Lágrimas en la Salette en 1846, luego en Fátima en 1917 y en Garabandal en 1961, poco antes, ¿casualidad?, del infame concilio Vaticano II, en 1962. España es hoy una… Leer más »