Los errores históricos imperdonables del cine: de héroes vulgares a gigantes con cuernos
Su en ocasiones buena factura técnica o su epicidad distraen la atención del rigor histórico, del que escasean. Han pasado a los anales de la historia del cine, bien por su calidad o por los éxitos cosechados en la taquilla, y grandes estrellas de Hollywood se prestaron a protagonizarlas, pero ni todas las bazas que poseen las salvan de cometer grandes errores históricos que, lejos de ser intencionados, han pasado desapercibidos.
Estas son algunas de las películas con fallos históricos más flagrantes:
«Braveheart»
«Braveheart», la épica película sobre la Primera Guerra escocesa de la Independencia y el liderazgo del héroe escocés William Wallace que encarnó Mel Gibson, con falda y la cara pintada, falseó la historia al intentar agrandar su heroica gesta, representándolo como un humilde campesino y no como el noble que en realidad fue. De hecho, le correspondía el título de caballero. Sin embargo, el mayor equívoco es vincular el apodo de Braveheart con Wallace, cuando en realidad a quien llamaban así era a Roberto Bruce, que en la cinta es retratado como un cobarde traidor.
Salvar al soldado Ryan
la película de Steven Spielberg, el capitán Miller acaba con el conductor de un «Tiger I» («Panzer VI») disparando a través del visor del conductor. Algo totalmente imposible en el año 1944, cuenta Manuel P. Villatoro:
¿Era tan fácil acabar con un «Tiger I» para la infantería americana? La respuesta es clara: no. De hecho, si en aquel junio de 1944 (durante el apogeo de la «Operación Overlord») un norteamericano hubiese imitado al capitán Miller, habría puesto en serio peligro su vida. Y es que, el visor del conductor del también conocido como «Panzerkampfwagen VI Ausf E» contaba por entonces con un bloque de vidrio formado por varias láminas capaces de resistir sin problemas los potentes cartuchos del calibre .45 que disparaba la Thompson. Así queda claro en la obra «Tiger tanks at war» (elaborada por Michael Green y James D. Brown): «El dispositivo de visión principal del conductor era un visor, protegido por un bloque de vidrio laminado […] que iba montado en la placa frontal del casco».
El patriota
De nuevo una cinta histórica con fallos y un protagonista recurrente en la lista: Mel Gibson. De la mano de Roland Emmerich, se mete en la piel de Benjamin Martin durante la Guerra de Independencia entre los colonos y la tropas de Jorge III. Resulta que, al contrario de lo que se muestra en la película, fueron los británicos los que ganaron la Batalla del Palacio de la Justicia de Guilford.
Los intocables de Eliot Ness
El fin de Al Capone no fue, como retrata la película, por la incansable persecución de Eliot Ness, sino por el trabajo del inspector de Hacienda Franklin H. Wilson, que lo cazó por evasión de impuestos. Más que un fallo histórico es cuestión de perspectiva, pues la película de Brian de Palma, protagonizada por Robert de Niro, está basada en las memorias del propio Ness.
300
La dependencia de los ilotas, los siervos de Esparta, brilla por su ausencia en la adaptación del cómic de Frank Miller sobre la batalla de las Termópilas entre los espartanos y las tropas persas cuyo líder, Jerjes, por cierto, no tenía un ejército de gigantes con cuernos, como aparece en la película. Licencias creativas.
(ABC)
Admiradores de 300. Esparta era una gran Nación de guerreros, cierto. Pero si en vez de el ejercito de Jerjes se hubieran enfrentado a una cohorte de Trajano.Hubieran durado muy poco.
Yo estudié cine, guión y dirección e interpretación… y lo primero que nos dijeron fue…. el cine es todo mentira….. hay que adaptarlo para que sea interesante……
El problema es que son películas para entretener y no para divulgación histórica. En cambio las películas sobre la SGM esas si que persiguen divulgar la historia y ellas no tienen rigor histórico alguno. Desde “Los cañones de Navarone”, pasando por “Holocausto” o “Malditos bastardos”, son sólo panfletos que distorsionan la historia a más no poder.
En Salvando al soldado Ryan el Tiger explota por la bomba del caza que pasa sobre el, no por el disparo del teniente, aunque por un instante este crea que es asi. De todas formas, aunque hubiera logrado matar al conductor, ello no haria explotarr al carro
Es otra escena, que tiene lugar bastante antes en la batalla, en la que introduce la bocacha de un subfusil Thompson por el visor del conductor del Tiger.
Curioso. Salvar al Soldado Ryan va en serio. Luego después de su visionado recomiendo ver “Los violentos de Kelly” , que parece que va en broma pero es mas seria y rigurosa en el tratamiento del Tiger.¡Cosas del cine!