Plaza de la Constitución, en Santiago de Chile

Un 75 por cierto de los chilenos está a favor de restringir la entrada de inmigrantes, mientras un 24 por ciento opina que el país debe mantener una política de puertas abiertas a su llegada, según los resultados de una encuesta publicados por la consultora Cadem.

A su vez, el 45 por ciento de los consultados considera que la llegada de inmigrantes es mala para el país, un 41% que es buena y un 12 por ciento que no es lo uno ni lo otro, de acuerdo con el sondeo, que mide semanalmente la evaluación del gobierno, la carrera presidencial y otros asuntos de interés público.

En tanto, la cantidad de inmigrantes que residen actualmente en Chile es “alta” para el 71 por ciento de los encuestados, y solo el 7% cree que es “baja”. En el país, menos del 3% de los habitantes son inmigrantes.

En ese contexto, un 73% se mostró a favor de endurecer los requisitos para los inmigrantes y dos de cada tres personas piensa que se debe expulsar a los indocumentados.

En la visión positiva sobre los inmigrantes, un 80% aprueba la llegada de médicos extranjeros, un 59% cree que los inmigrantes aportan al enriquecimiento cultural del país y un 58% que son una oportunidad de desarrollo y productividad para Chile.

El debate sobre la inmigración fue abierto hace una semana por el ex presidente y eventual candidato a un nuevo mandato Sebastián Piñera, quien asoció la inmigración con la delincuencia y dijo que “muchas bandas” de delincuentes están compuestas por extranjeros.

La derecha política respaldó la idea y comenzó a estudiar proyectos de ley para endurecer las normas de inmigración, lo que Piñera reiteró este lunes en una entrevista con radio Cooperativa.

“Me opongo, y sería absurdo, ingenuo e incluso estúpido, que Chile abriera las puertas a aquello que estamos combatiendo dentro de Chile, y dejar entrar a personas que sabemos que vienen a delinquir, a cometer delitos de narcotráfico, de trata de personas, sean chilenos o sean extranjeros”, sostuvo.

“Siento que Chile debe ser un país que acoja con los brazos abiertos a los inmigrantes que vienen a formar una nueva vida, a respetar nuestras leyes, a integrarse a nuestra sociedad, a aportar al desarrollo, pero con la misma fuerza creo que Chile sería muy ingenuo y muy poco inteligente si abriera sus puertas a aquellos que no queremos que lleguen”, argumentó.

“No queremos que llegue a Chile el narcotráfico, la trata de personas, el crimen organizado, la inmigración ilegal”, precisó.

La mandataria Michelle Bachelet anunció un proyecto para modernizar la normativa de inmigración, que data de 1975 y es considerada restrictiva por diversos sectores.

En Chile, oficialmente, la cifra de extranjeros residentes, sin considerar a los indocumentados, se acerca al medio millón de personas (entre casi 18 millones de habitantes) y Bachelet recordó que los chilenos que viven en el exterior son muchos más, unos 900.000.

Piñera se mantiene como favorito en la carrera a los comicios presidenciales de noviembre de 2017, con un 24 por ciento de adhesiones, seguido del senador independiente Alejandro Guillier con un 14% y del también ex presidente Ricardo Lagos con un 5 por ciento.