BD.- Nacionalidad israelí ocultada, presunta conversión al islam, conexión con los servicios secretos israelíes y el movimiento antiislámico, vídeo puesto en circulación por una oficina sionista de propaganda norteamericana: estos son los elementos inquietantes del asunto Sotloff.?

?Es oficial: un portavoz del Ministerio israelí de Asuntos Exteriores ha revelado que el periodista norteamericano, miembro de una familia judía practicante y ultrasionista? de Miami, estaba también en posesión de la nacionalidad israelí. Según las autoridades de Tel Aviv, este dato había sido mantenido en secreto para no poner en peligro al reportero secuestrado por el Estado Islámico. En la misma línea la prensa local ha publicado varios elementos biográficos poco conocidos de Steven sotloff: el hombre, de 31 años, había efectuado su aliya (establecimiento en Israel) en 2005 y había tenido hasta 2008 una formación universitaria en el Centro Interdisciplinario de Herzliya.
http://www.master-maestrias.com/universidades/Israel/IDC-Herzliya/

?Este centro de estudios no es anodino para los especialistas del mundo del espionaje: se trata en realidad de un vivero de futuros (y ex) agentes secretos israelíes.? Es un lugar cercano al Mossad, según los entendidos.

?Entre 2008 y 2013, Sotloff recorrió Oriente Próximo como periodista freelance. Sus primeros empleadores fueron The Jerusalem Post y The Media Line?, dos medios cercanos a la derecha dura israelí.

?Entre 2011 y 2013, Sotloff también mantuvo una intensa correspondencia con un periodista israelo-estadounidense que también ha pasado por la misma escuela de Herzliya. Este hombre, Oren Kessler, con base en Londres, es miembro de la Sociedad Henry Jackson, un influyente think-thank del neoconservadurismo (pro-Israel, pro-EEUU y anti-islam)? orientado hacia Europa. Al enterarse de la muerte de su compatriota, Kessler envió un homenaje a la página web Politico a su “casi amigo” que nunca llegó a conocer en persona. Cosa extraña: cuando salió su texto, el sitio contenía la mención de la escuela de Herzliya, pero en una versión posterior ese dato estaba censurado, como lo prueba la copia en caché de Google.

Antes de la censura:
http://www.panamza.com/wp-content/uploads/2014/09/avantsotloff.png

Después de la censura:
http://www.panamza.com/wp-content/uploads/2014/09/apressotloff-1024×252.png

?En su? homenaje, Kessler revela que Sotloff fingía ser musulmán en el transcurso de sus viajes por los países árabes. Otro testimonio corrobora ese punto precisando que Sotloff pretendía ser de origen checheno para justificar la consonancia de su nombre.

?Un detalle importante que hay que subrayar, teniendo en cuenta los contactos israelíes atípicos de Sotloff: el organismo que ha dado a conocer el vídeo de su decapitación está también relacionado con los servicios secretos norteamericanos y israelíes? así como con la derecha sionista antimusulmana. Se trata de una estructura denominada SITE Intelligence Group. El diario británico The Telegraph ha indicado que los yihadistas del Estado Islámico han sido curiosamente sorprendidos al descubrir el vídeo circulando por Internet. El corresponsal en Washington del periódico inglés precisa que SITE, que se encuentra en el origen de la divulgación del vídeo, no ha querido dar explicaciones sobre las circunstancias de su hallazgo, y se ha contentado con afirmar que el documento se encontraba en un “sitio de intercambio de ficheros”.

?Si nos conformáramos con la información ofrecida por los medios de la gran prensa, podríamos pensar que SITE es únicamente un “servicio que vigila el activismo fundamentalista en Internet”?, así como que el Centro Interdisciplinario de Herzliya no sería más que un “establecimiento privado cerca de Tel Aviv”. Pero hay un problema: el grupo SITE está más cerca de ser una oficina ideológica que de un laboratorio de investigaciones universitarias, Su directora y fundadora se llama Rita Katz.

Rita Katz

Rita Katz es hija de un judío iraquí ejecutado en la plaza central de Bagdad por espionaje a favor del Estado hebreo. Esta israelo-estadounidense está tan cerca del FBI como de los círculos sionistas. A su llegada a los EEUU colaboró con una agencia relacionada con la derecha radical antiislámica israelí (“The Investigative Projecto on Terrorism”). Katz conocío su momento de gloria en 2003, con ocasión de la publicación de su libro “Terrorist Hunter”, en el cual contaba (en un estilo sensacionalista) sus infiltraciones en los grupos islamistas. Es conocida por haber dicho en alguna ocasión que “los judíos pertenecen a Israel”, y que estos deben estar siempre a su servicio. Se ha hecho una reputación entre los expertos en terrorismo: la mayoría de los documentos audiovisuales falsamente imputados a Bin Laden y difundidos por los medios han sido “descubietos” por su “centro de vigilancia de los sitios islamistas”, a veces conjuntamente con otro grupo llamado IntelCenter.

Esta estructura socia también ha difundido en solitario gran cantidad de vídeos o mensajes atribuidos a Al-Qaeda. En enero del 2001, su presidente, Ben N. Venzle, salío a la escena nacional al publicar un informe detallado sobre el “ciber conflicto israelo-palestino”. IntelCenter era inicialmente una emanación de iDefense, un laboratorio dirigido por el cristiano evangélico Jim Melnick, militar por aquel entonces encargado de las operaciones sicológicas ante el ministro de Defensa (y amigo declarado de Israel) Donal Rumsfeld.

Fundado en 2002, el sitio web del “servicio de vigilancia” dirigido por Rita Katz (y copiado sin pestañear por la prensa occidental) tiene una particularidad. Hasta el año 2008 estada localizado en un servidor que cobijaba también varias plataformas de la comunidad judía norteamericana, algunas de las cuales son de carácter ultrasionista y/o anti-islam. Ese mismo año, un diario británico reveló que una foto presentada por SITE como la ilustración islamista de una (prevista) devastación nuclear en Washington provenía en realidad de un vídeojuego.

?Una ligereza tal recuerda casi la de los filmadores de la decapitación de Steven Sotloff: mientras que el vídeo de la muerte de su colega James Foley presenta trucajes (según varios expertos de distintos medios), la de Steven Sotloff comporta igualmente un elemento singular digno del teatro de improvisación. Al final de la secuencia, se puede oir en voz baja (en inglés) alguien que se felicita por la prestación del hombre vestido de negro: “¡Bien, bien!”

Al final del vídeo de esta página: http://nieuws.thepostonline.nl/2014/09/02/video-onthoofdt-amerikaanse-journalist-steven-sotloff/

Se trata de una curiosa falta de profesionalidad que se añade a una contradicción nunca subrayada en la prensa occidental: en los vídeos de Foley y de Sotloff, la decapitación no está enteramente filmada. Un velo negro aparece cubriendo los primeros segundos de la decapitación. Después aparece el cuerpo tendido en el suelo con la cabeza ensangrentada encima. Esto es totalmente contrario a los demás vídeos del Estado Islámico, que son particularmente crudos. Hasta ahora los filmadores siempre han recogido imágenes de alta definición a sus víctimas antes, durante y después de su ejecución. ¿Por qué Foley y Sotloff, sin embargo presentados como emblemas del enemigo norteamericano, han tenido derecho a un régimen de exepción? Es un misterio.