Anglada, junto al presidente de honor de PxC.

El presidente de Plataforma per Catalunya, Josep Anglada, señala que las recientes declaraciones de Jordi Pujol en las que reconoce la nula voluntad de integración de los inmigrantes musulmanes avalan uno de los argumentos que su partido lleva denunciando durante años. El líder identitario lamentó son embargo que las palabras del expresidente de la Generalitat “lleguen tarde y en un contexto donde la población musulmana supera los 400.000 miembros en Cataluña”. El líder identitario recordó que “fue precisamente CiU quien abrió las puertas a la inmigración magrebí en Cataluña bajo el mandato del propio Pujol”.

En ese sentido el presidente de PxC denunció que CiU promoviese “la llegada masiva y posterior regularización de inmigrantes musulmanes en el marco de los acuerdos políticos e industriales con el gobierno marroquí para que la industria catalana se estableciera en Marruecos”. “En definitiva”, añadió, “CiU selló un pacto que perjudicaba doblemente a los intereses de Cataluña al poner en marcha su islamización y el desmantelamiento de la industria catalana”.

Anglada calificó estos acuerdos de “irresponsables y suicidas”, lo que le lleva a una conclusión: “CiU vendió Cataluña al Islam sin medir las consecuencias. Ahora estamos siendo testigos de cómo surge una sociedad paralela sin voluntad de abandonar una cultura retrógrada y de asumir los valores que nos han permitido construir una sociedad avanzada y en la que se respetan las libertades individuales”.

Lo peor para Anglada es que CiU, “lejos de enmendar los errores del pasado, los está reeditando”. Y puso un nuevo ejemplo para apuntalar su tesis: “Recientemente, Artur Mas viajó a Marruecos para festejar a la dictadura alauí, seguir deslocalizando a la ya maltrecha industria catalana y, lo más sorprendente de todo, elogiar el papel de los inmigrantes marroquíes en Cataluña, esos mismos que acaparan las ayudas sociales que la gente de casa ha generado durante años de esfuerzo y trabajo”.

Por todo ello, Anglada lamenta que, al igual que ha hecho ahora Pujol, muchos políticos reconozcan “el peligro que supone el Islam para Cataluña sólo cuando no hay micrófonos cerca o cuando ya han dejado la actividad política”. Este fue también el caso del ex presidente del Parlament de Cataluña y ex lider de ERC, Heribert Barrera, quien en sus memorias alertaba sobre la imposible convivencia entre inmigrantes musulmanes y catalanes autóctonos.

Para Anglada, existe “un pacto de silencio de la clase política en relación con los problemas que ha traído consigo la inmigración, alentada indistintamente por gobiernos de uno y otro color”.