En lo que parece un ejemplo de actividad mafiosa sin demasiados precedentes, el asalto descarado e interesado de la sede de las “facturas falsas” como se conoce al Distrito Macarena sube un entero más al señalar el nuevo Ayuntamiento gobernado por el Partido Popular que ha tenido que ser alguien de la etapa anterior, coalición de gobierno PSOE-IU, buen conocedor del Distrito y sus papeles, quien entró sin permiso en la sede municipal y alteró los sellos municipales. El PSOE pide «esfuerzo policial» para aclararlo y los vecinos confirman que el pasado fin de semana “hubo alguien dentro”.

La delegada del Distrito Macarena, la popular Evelia Rincón, confirmó ayer punto por punto toda la información publicada por ABC sobre el asalto a la sede del citado distrito para «manipular documentación». Según la concejal del PP, el autor del allanamiento del edificio municipal «tuvo que ser alguien de la etapa anterior o que tuviera llave», ya que la investigación policial ha confirmado que la persona que estuvo durante la noche del martes en el distrito accedió usando la llave de la única puerta a la que no se le había cambiado la cerradura.

«La semana pasada vinieron unos empleados de Edificios Municipales, pero la cerradura de esa puerta no la pudieron cambiar porque no tenían el bombín adecuado», reveló Rincón, quien añadió que la citada cerradura se cambió ayer, tras los sucesos, y que ése era el único lugar por el que se podía entrar en el edificio usando los juegos de llaves del anterior mandato.

Hay tres personas que tienen oficialmente las llaves desde que cambió el equipo de gobierno; el subdirector del distrito, José María González; la jefa de negociado, Raquel Gutiérrez; y el vigilante de seguridad de la empresa Magasegur, pero ninguno de ellos accedió al edificio durante el tiempo en el que ocurrieron los hechos.

La investrigación se centra en otras personas que pudieran tener copias. Y una de las claves podría estar en que la puerta usada para acceder, la de la calle Abuyacub, era la única que mantenía la cerradura tras el cambio de gobierno. Además, ese acceso da entrada directamente hacia la zona administrativa, lugar en el que se archivan los expedientes del distrito.

El distrito Macarena tiene siete funcionarios. De no llegarse a conocer qué expedientes pueden haber sido falsificados, determinadas responsabilidades recaerán sobre ellos si alguno de los documentos manipulados incurriera en una ilegalidad. El distrito tiene un «caos administrativo total», indicó la delegada, que exculpó en todo momento a los empleados. «Los expedientes los inician los delegados, no los funcionarios, y aquí hay un caos absoluto. Tendremos que revisarlo todo, por lo que a día de hoy no podemos acusar a nadie de nada», aclaró Evelia Rincón.

La Policía Científica, encargada del caso, no tiene duda ya de que el sello de entrada y salida de documentos oficiales había sido manipulado y que había que conocer muy bien la oficina para saber su ubicación y usarlo: «Para acceder al sello tienes que saber que está en el primer cajón y eso no lo sabía ni yo», sentenció la delegada.

La jefa de grupo del Distrito, María José Dorado, persona que custodia y da uso a este sello desde hace dos décadas, explicó que ella tiene la manía de dejar el sello en el citado cajón cada día justo antes de marcharse y con la fecha de la jornada en curso. Según sus explicaciones, hay otros funcionarios que antes de irse colocan la fecha del día siguiente, pero ella no lo ha hecho en 20 años. El sello, por tanto, tenía que haber mantenido la fecha del 4 de julio de 2011. Sin embargo, está puesto en el 7 de junio, cuatro días antes del cambio de Gobierno, lo que no quiere decir que haya que revisar sólo los documentos que tengan esa fecha, ya que el autor de los hechos pudo habver usado varias fechas.