Granada despide al cantaor Enrique Morente
Después de que ayer Madrid se despidiera de Enrique Morente en la sede de la SGAE, hoy es su Granada natal la que da el último adiós al artista. Más de 2.000 personas se han congregado a las puertas de la capilla ardiente del cantaor, instalada en el Teatro Isabel la Católica, para despedir a su vecino. En entre los asistentes se ha podido ver, además de personas anónimas, a muchos amigos de Morente, como Luis García Montero, Almudena Grandes, Miguel Ríos, Marina Heredia, Curro Albaicín, Tatiana Garrido o Paco Ibáñez.
Desde las 13.40 horas la capilla ardiente recibe un goteo de ciudadanos con ánimo de trasladar su pésame a la familia Morente y mostrar sus respetos ante el féretro del fallecido. Uno de los últimos en llegar ha sido el cantautor Paco Ibáñez, que sobre las 15.15 horas entraba en el teatro. Además, han sido muchos los vecinos del Albaicín, barrio que vio nacer allá por la Navidad de 1942 a Morente, los que se han acercado al céntrico edificio, y otros tantos allegados y conocidos los que a lo largo del día han hecho llegar sus coronas de flores a la capilla, entre ellos el guitarrista de jazz estadounidense Pat Metheny, que ha compartido escenario musical con Morente.
En el interior del teatro, el féretro está situado en el centro del escenario, flanqueado por cuatro grandes candelabros y rodeado por la familia del cantaor, entre ellos su viuda e hijos, que han llegado a derrumbarse mientras autoridades y amigos les trasladaban sus condolencias. Al fondo, una gran fotografía del cantaor en el Patio de los Leones de la Alhambra preside la sala. En la entrada, los miles de ciudadanos que hacían cola para entrar en la capilla han podido despedirse del cantaor a través de varios libros de condolencias, donde prácticamente la mayoría quería dejar patente su dolor por esta “repentina e injusta” muerte, como muchos han dejado escrito.
Último paseo por la Alhambra
A las 16.30 horas tendrá lugar un homenaje a puerta cerrada en el que Luis García Montero dedicará a la memoria del cantaor unas palabras, y Laura García-Lorca de los Ríos leerá el poema de su tío ‘Llanto por la muerte de Ignacio Sánchez Mejías’. Para García Montero, que ha atendido a los numerosos periodistas congregados a las puertas de la capilla, Morente era una persona “que demostraba que no se pueden hacer distinciones entre la cultura popular y la cultura de la gente académica y culta”, puesto que sabía “escoger muy bien” un poema de San Juan de la Cruz, como de Rafael Alberti o María Zambrano y cuando elegía una letra popular, del folclore, lo hacía también de una manera “llena de elegancia”. “Fallan las palabras, hay situaciones donde las palabras son insuficientes. Morente tenía una elegancia natural, la vida fue su gran maestra, le enseñó muchas cosas, la dignidad, la sencillez y la humildad”, ha señalado.
Aproximadamente a las 17.00 horas el féretro será trasladado por la Cuesta de Gomérez, atravesando la Alhambra, hasta el cementerio de San José. En el camposanto está previsto que el cantaor sea enterrado en una tumba junto al panteón de personas ilustres, en el Patio de San Antonio. Será en un acto privado, sólo abierto a la familia y a los más cercanos.