El Parlamento Europeo entrega el Premio Sajarov a una silla cubierta con la bandera cubana
Una silla vacía con la bandera cubana ha marcado este miércoles la ausencia del disidente cubano Guillermo Fariñas en la entrega del premio Sajarov 2010 en el Parlamento Europeo en Estrasburgo (Francia), al no haber obtenido el permiso del Gobierno de los hermanos Castro para salir de la isla.
“Esta silla vacía demuestra cuán necesario es este premio” que cada año homenajea a una figura defensora de los derechos humanos en el mundo, ha declarado el presidente del Parlamento Europeo, Jerzy Buzek, en la ceremonia de entrega.
Guillermo Fariñas, de 48 años ,ha esperado en vano hasta el último momento el permiso necesario para salir de Cuba y viajar a Francia para recoger el premio. Buzek ha lamentado que las autoridades cubanas no le hayan concedido la autorización pese a haber escrito la semana pasada al presidente Raúl Castro pidiéndole el permiso.
El presidente del Parlamento Europeo ha reclamado además la liberación “inmediata” de todos los presos políticos cubanos y ha pedido a la jefa de la diplomacia europea, Catherine Ashton, entablar un “diálogo con la sociedad civil” cubana.
FARIÑAS HA REMITIDO UN DISCURSO GRABADO
Psicólogo y periodista, Guillermo Fariñas ha protagonizado 23 huelgas de hambre, la más sacrificada de ellas este año, durante 135 días, a raíz de la muerte el 24 de febrero de Orlando Zapata, que falleció siguiendo la misma protesta.
En un discurso grabado, que se ha retransmitido en el Hemiciclo, Fariñas ha llamado a los europeos a mantenerse firmes con las autoridades cubanas.
“Mi mayor esperanza es que no se dejen engañar por los cantos de sirena de un cruel régimen de comunismo salvaje”, cuya “única aspiración” es que la UE levante la Posición Común, un documento que exige a La Habana avances en derechos humanos y democracia, ha escrito Fariñas.
El hecho de que La Habana no le autorizara a viajar a Estrasburgo es el “testimonio más fehaciente de que por infortunio nada ha cambiado en el sistema autocrático de mi país” lamenta Fariñas en el discurso fechado del 14 de diciembre en Santa Clara, la ciudad donde reside, al este de La Habana.
La Habana “aparenta supuestos cambios económicos” con el único objetivo de que los europeos deroguen la Posición Común, insiste en su mensaje grabado. De esta forma, las autoridades se “beneficiarían de los créditos e inversiones con que se auxilian a los países del Tercer Mundo en los Acuerdos de Cotonou”, afirma en referencia al acuerdo de intercambio comercial que la UE mantiene con el grupo de países África, Caribe y Pacífico (ACP).
Finalmente, el disidente cubano pide a los eurodiputados “no ceder antes las pretensiones” del gobierno cubano a menos que éste cumpla una serie de requisitos, principalmente la liberación “sin destierro” de todos los presos políticos y el respeto de los derechos humanos en la isla.