Se descubre que algunos calamares…¡pueden volar!
Primero nos trasladamos hasta el año 2001, a las paradisiacas playas de Jamaica donde se encontraban la bióloga marina Silvia Maciá y su esposo, realizando sus investigaciones. Una mañana consiguieron ver un banco de lo que en un principio creyeron peces saltando entre las olas. Al acercarse, descubrieron con asombro que en realidad se trataba de varias docenas de calamares.
Después de estudiar aquel comportamiento la bióloga comprobó que no era inusual. Se encontraron con muchos testimonios que afirmaban frecuentes casos de calamares saltando cerca de embarcaciones. Sin embargo, tanto ella como su esposo estaban seguros de que lo que habían presenciado aquel día “no eran simples saltos” sino que además “parecían impulsarse en el aire”.
La investigadora explicaba: “A partir de nuestras observaciones, parecía que el calamar no sólo saltaba sino que era capaz de prolongar su vuelo”… “Incluso, uno de nuestros co-autores los vio realmente batiendo sus aletas. Algunas personas han visto chorros de agua durante ese vuelo. Sentimos que “vuelo” es más adecuado, ya que implica un comportamiento activo”
Sin embargo desde entonces les ha sido muy difícil captar ese momento preciso de estos calamares en imagen… hasta ahora.
Hace unos días aparecían por primera vez unas fotografías en las que realmente se demostraba que estos calamares no sólo saltaban entre las olas, sino que eran capaces de impulsarse mediante chorros de agua realizando así un desplazamiento aéreo que, ciertamente, se podría considerar “vuelo”.
Javier Peláez