El Carrizal de Ingenio vive conmocionado tras conocer el parricidio de un bebé de 12 días de vida que fue hallado ayer muerto en el interior de una mochila en un invernadero abandonado de la localidad. Su madre, de nacionalidad china, degolló supuestamente al pequeño y lo introdujo en el bolso, donde fue encontrado por un vecino después de que todo el pueblo buscara a la progenitora y a su hijo durante toda la tarde al presentar su padre una denuncia por desaparición. A pesar de que los agentes de la Policía Local de Ingenio trasladaron al bebé hasta el centro de salud del casco, nada pudieron hacer por salvarle la vida.

La trágica historia comenzó sobre las 14:00 horas de ayer cuando el padre de la criatura llegó a su vivienda y se encontró con que ni su pareja, identificada como M. L. y de unos 25 años, ni tampoco su bebé, que hacía tan sólo 12 días había nacido, se encontraban en el interior. Además, se percataba de que se había dejado el móvil, por lo que no podía contactar con ella.

De inmediato dio a conocer los hechos a la Guardia Civil y a los residentes de la zona, que comenzaron a rastrear los terrenos cercanos a la calle República Argentina, donde la pareja vive junto a otros dos familiares. No fue hasta las 18:30 horas cuando un vecino que participaba en las batidas halló en un invernadero abandonado, y situado a unos cien metros de la vivienda, a la madre. Estaba sentada en el interior de un cuarto de aperos derruido. Junto a ella había un bidón oxidado y a los pies del depósito una pequeña mochila de unos diez centímetros. Fue una amiga de la progenitora la que cogió el bolso y lo abrió. Dentro se encontró el cuerpo del pequeño, que el pasado día 7 de abril había nacido en Gran Canaria, con un corte en el cuello que supuestamente le había provocado su madre, según fuentes cercanas al caso.

Agentes de la Policía Local se personaron en el lugar y al ver el estado del niño decidieron trasladarlo en un vehículo policial y cogido por sus propias manos hasta el centro de salud de Ingenio. El médico sólo pudo certificar la defunción del pequeño. Por su parte, la Guardia Civil detuvo a M. L. como presunta autora del homicidio, quien fue trasladada al cuartel de la Guardia Civil de Agüimes. Allí le tomaron declaración ante un interprete de chino al no tener suficientes conocimientos de español para describir lo sucedido.

Según indicó anoche el oficial de la Policía Local de Ingenio, Justo Santana, la madre “estaba en un estado depresivo después de dar la luz”. Este es, según fuentes consultadas, la principal hipótesis sobre el móvil del crimen. La Policía Judicial de la Guardia Civil se encarga de la investigación y anoche recogían muestra del descampado donde se halló a la mujer junto a su niño muerto.