Ignacio Pozo.- El concepto de Hispanidad comienza a utilizarse, a partir de los grandes nombres de la Generación del noventa y ocho, cuando se pierden los últimos territorios españoles en América: Cuba y Puerto Rico. Destacados escritores como Ramiro de Maeztu, Labra, Madariaga, Menéndez Pidal o Américo Castro coinciden en que hay tres cuestiones que lo conforman: raza, religión y lengua

La Hispanidad nos hermana con más de 500 millones de personas de distinta raza, religión e ideología que usamos un lenguaje común. España nunca impuso su lengua a los nativos. Jamás obligó a nadie a comunicarse en español. Los datos son demoledores. A modo de ejemplo, en 1821, cuando se consumó la independencia de México, Nueva España contaba con seis millones de habitantes. De ellos, el 60% no hablaban español, sino náhuatl o algún otro dialecto indígena. Es algo que muchos españoles ignoran, y que el termino Hispanidad rescata .

España es única en muchas cosas, y la endofobia (rechazo de lo nuestro) desgraciadamente es una de ellas. Todo se ideologiza en función de propias creencias políticas de cada uno, y se transmite a la grey de forma espuria. En términos históricos, fueron los ingleses en a partir del siglo XVIII los primeros en utilizar la “leyenda negra” en contra de España, ante la imposibilidad de numerosos intentos de ganarle territorios en el frente de batalla. Lo que hoy llamamos “fake news” fue utilizado magistralmente por ellos para desmembrar los Virreinatos españoles en 33 estados, básicamente para colonizarlos económicamente. Los datos son concluyentes, los Virreinatos hispanos fueron auténticas potencias económicas y culturales durante siglos, y sus riquezas se quedaron, y están allí: En el periodo virreinal no se conocieron guerras en sus extensos territorios desde Texas a la Patagonia. La integración racial, social y económica era evidente de los países que la integraban. La evidencia estadística es concluyente, pues la relación de criollos con descendientes de españoles era al final del virreinato de un 60 y un 40 por ciento. Hoy no llegan los primeros al 10%.

Es más, 33 ciudades Hispanas de América en 15 países, han sido declaradas como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. De las colonias inglesas, holandesas y francesas en América y en otras partes del mundo no han encontrado algo para una declaración como esta. A esta maravilla de ciudades, hay que añadir que los españoles y sus descendientes erigieron miles de edificios significanticos como 23 universidades, 135 hospitales o 354 catedrales de un maravilloso estilo barroco, gótico o renacentista. De estas edificaciones 52 obras también son Patrimonio de la Humanidad.

Ninguna potencia colonizadora, España no lo fue ni jurídica, ni políticamente, construye, integra y potencia territorios para dejar sus riquezas allí. Ni hubiera podido si quiera imponer su idioma, región o cultura. El caso español es único.

Finalmente, la fecha del 12 de Octubre, día de la Virgen del Pilar, patrona de España, recuerda el comienzo de una nueva era universal, marcada por la llegada de la expedición de Colón a las Américas en 1492, una gesta que cambiaría el devenir de nuestra nación y el transcurso del mundo moderno. Pero también reivindica todo el bagaje cultural, literario, artístico, científico y humanístico que alcanzaron su apogeo en el Siglo de Oro español. Por ello, en el Día de la Hispanidad ese vínculo de todos los pueblos hermanos brilla aún más.

Frente a las tendencias anticulturales históricas, y religiosas, nuestra arma más valiosa consiste en el conocimiento y el valor de defenderlo. Debemos enorgullecernos de nuestra historia, de nuestra contribución universal y, así, mantener vivos los lazos de sangre que nos unen a nuestros hermanos hispanoamericanos.

*Abogado y colaborador de AD