El secretario de Defensa de Estados Unidos, Pete Hegseth, ha convocado a generales y almirantes estadounidenses de distintos destinos alrededor del mundo a una reunión en Quantico, Virginia, la próxima semana, según confirmaron a Reuters cinco funcionarios este jueves. La convocatoria, realizada con poca antelación, ha generado sorpresa e incertidumbre entre algunos de los oficiales citados, quienes suelen tener agendas definidas con semanas de anticipación.

De acuerdo con fuentes consultadas, no está claro el propósito de la reunión ni cuántos de los altos mandos finalmente asistirán. “La gente está reorganizando sus planes para ver si tiene que asistir”, comentó un funcionario estadounidense bajo condición de anonimato.

Un portavoz del Pentágono, Sean Parnell, se limitó a señalar que “el Secretario de Guerra se reunirá con sus principales líderes militares a comienzos de la próxima semana”.

La denominación “Departamento de Guerra” responde a un cambio impulsado por el presidente Donald Trump, aunque su implementación formal requiere aún la aprobación del Congreso.

El vicepresidente J.D. Vance restó importancia a las especulaciones y aseguró que “no es particularmente inusual que los generales que reportan al secretario de Guerra y luego al presidente se reúnan con él. Es extraño que se quiera convertir en una gran historia mediática”.

Trump, por su parte, fue consultado en la Casa Blanca sobre el encuentro y se mostró favorable a la iniciativa. “Me encanta, creo que es algo positivo. ¿No es bueno que los generales y almirantes de todo el mundo vengan a reunirse con nosotros? Yo soy el presidente de la paz, y llevarse bien es importante”, afirmó. El mandatario no descartó su presencia en la reunión si así se lo solicitan.

El encuentro ocurre en un contexto de fuertes cambios en la cúpula militar. Desde febrero, Hegseth ha emprendido una reestructuración acelerada en el Departamento de Defensa, que incluyó la destitución del jefe del Estado Mayor Conjunto, el general C.Q. Brown, y de otros altos oficiales, además de una reducción del 20% en el número de generales de cuatro estrellas y recortes adicionales en la Guardia Nacional y en otras ramas. “Más generales y almirantes no significan más éxito”, dijo Hegseth en mayo al justificar las medidas.

Aunque la naturaleza exacta de la reunión en Quantico sigue sin esclarecerse, el hecho de reunir a tantos oficiales de alto rango en un mismo lugar es poco habitual y ha generado expectativas sobre las prioridades que marcarán la agenda de la defensa estadounidense en los próximos meses.