Encierros, ¿bueno o malo para la fiesta de los toros?
La cuadrilla del Búcaro.- El Encierro, desde antaños escritos, es básicamente el traslado de los animales a la plaza de toros donde serán lidiados posteriormente. Un manejo de reses convertido por tradición y costumbre popular en un acto festivo, corriendo los toros en la previa del festejo de la tarde. Esa es la esencia primigenia, con sus variantes adaptadas como los peculiares encierros por los pueblos de vacas, novillos o toros, sin acto posterior.
Está creciendo dicen la afición a correr encierros, con el soporte mediático de televisiones y redes, que luego no se hacen eco del festejo de la tarde, fin por el que nació el encierro. Es un gran reclamo, en un espectáculo gratuito, que obvia la premisa principal que sustenta el acto, y no es otro que el festejo de la tarde en la plaza.
Otro aliciente, muy valorado por los corredores, es el prestigio del ganado que va a trotar por las calles, a la cabeza San Fermín y sus astados de Primera linea. En el resto de poblaciones no son tan afortunados y tienen que adaptarse al empresario de turno y sus posibilidades en las corridas de la tarde, prestando su ganado, que consta en el pliego, para la carrera matinal.
Y termino. Todos quieren correr las ganaderías de prestigio por la mañana, pero salvo Pamplona, no tienen la misma respuesta popular los festejos por la tarde. Peligroso desequilibrio que puede cuestionar su viabilidad futura. Sin corridas no hay razón física ni económica para que haya encierros. Se pueden traer, como en muchas poblaciones, toros para la ocasión, de divisas de menor prestigio y animales de peor condición, pero el corredor, cada día más exigente y preparado, quiere correr juntos a los Miuras o Escolares, y no delante de los bichos del Tío Picardías. Luego se olvida de pasar por taquilla en la corrida de la tarde, sin pensar en la supervivencia del invento.
A qué viene este rollo, se preguntarán con razón, pues es sencillo de explicar sin dejar mi calentura. Ayer en Cuéllar hubo un tercio de plaza por la tarde, mientras que a la mañana los mismos Pablo Romero tuvieron éxito en el encierro. Es algo común, salvo Pamplona, en las ferias que corren los toros de la corrida. Tudela, Tafalla, San Sebastián de los Reyes, triunfan por la mañana y luego con los mismos toros hay mucho cemento en los tendidos. He intentado explicarme, muchas veces no lo consigo.











