Un infalible David de Miranda abre la Puerta Grande en Almería
Llegaba David de Miranda a Almería en sustitución de Morante de la Puebla con la mente puesta en seguir demostrando que merece el hueco que hasta el momento no se le da en las grandes ferias. Y lo hizo con dos actuaciones marcadas por la rotundidad infalible que está consiguiendo en los últimos meses. El diestro onubense cortó tres orejas en una tarde de valor y exposición que puso al público almeriense en pie durante varios tramos de sus faenas. Otra tarde, otro triunfo. Lo hizo en una corrida en la que el juego de los toros condicionó la labor de los espada, con Juan Ortega y Fortes sorteando los lotes más deslucidos. El malagueño pinchó ante el primero una faena de mucha torería, mientras que el sevillano pudo pasear un trofeo del segundo, el cual no fue concedido por el presidente, y sorteó el peor toro de la corrida en quinto lugar.
David de Miranda entró en el cartel de esta tarde por la vía de la sustitución. Ante el tercero de la tarde, de Álvaro Núñez, no pudo lucirse en el saludo capotero. Sí que lo hizo en un quite por saltilleras que puso emoción a la tarde, conectando mucho con el público almeriense. El toro, estrecho de sienes y de buenas hechuras, fue manso desde su salida. La falta de transmisión que tenía el burel, se la puso David de Miranda. Después de sacarse al toro a los medios de rodillas, el onubense realizó una faena de gran intensidad por lo que se jugó en ella. Muy asentado y firme, se lo pasó siempre muy cerca, dejando momentos que pusieron al público en pie. Una faena que no pudo tener su lado más rotundo en el toreo fundamental debido a la condición del toro, pero que sí que la tuvo en cuanto a la exposición del diestro. Remató su actuación con unas ajustadísimas bernadinas. Se tiró recto y dejó una estocada en muy buen sitio. Dos orejas.
Se estiró a la verónica David de Miranda frente al sexto de la tarde, un toro que fue de más a menos. No pudo lucirse en el toreo fundamental el onubense. Comenzó por estatuarios y, posteriormente, firmó una labor que siempre estuvo condicionada por la sosería de su oponente, que no tuvo recorrido en la muleta de De Miranda, que siempre tuvo disposición, dejando incluso algunos muletazos de buen corte. Subió un punto el nivel de la faena en el nivel de mondeñinas. Estocada de efecto fulminante. Oreja con leve petición de la segunda.
Unas verónicas muy toreras firmó Juan Ortega a la salida del segundo de la tarde, un toro que fue de más a menos. Tuvo mucho el empaque el inicio, con unos ayudados por alto y unos doblones con la rodilla en tierra, rematados con el molinete y uno de pecho. El de Álvaro Núñez tuvo como virtud la prontitud y la humillación, aunque exigía limpieza en los muletazos, ya que soltaba la cara y tocaba la muleta. Faena corta pero de mucho sabor del sevillano, que encontró por el pitón derecho los mejores momentos, llevando largo al animal. Estocada entera en buen sitio. Falló con el verduguillo. Pese a la petición del público, el presidente no le concedió la oreja. Ovación.
El quinto toro salió al ruedo con sosería y falta de transmisión. Después de perder las manos en el tercio de varas, el público comenzó a pedir la devolución del animal. Con los tendidos a la contra, el presidente acabó cediendo durante el tercio de banderillas y sacó el pañuelo verde. Salió un sobrero de Álvaro Núñez que tampoco tuvo ninguna opción de lucimiento para Juan Ortega, embistiendo a arreones y sin celo ni raza. Abrevió el sevillano.
El primero de la tarde, un toro cornidelantero de Vellosino, tuvo poco recorrido en el capote de Fortes. Aún así, el malagueño dejó verónicas en las que estuvo muy asentado y una buena media. Cuido siempre al animal, en un inicio muy torero que fue el preludio a una faena medida y de bella factura. Sobre la mano derecha, Fortes buscó ir exigiendo al burel en tandas ligadas. Cuando se puso sobre la mano izquierda, surgió el toreo más puro. Muy asentado, vertical, componiendo la figura, fue cosiendo el malagueño naturales que calaron en los tendidos. Muy por encima del toro. El final fue extraordinario, con ayudados por alto, naturales y una trinchera. La espada hizo guardia. Tuvo que hacer uso del descabello, escuchando un aviso.
No tuvo suerte Fortes con el cuarto de la tarde, un toro que apuntó desde su salida una sosería y falta de raza. Lo intentó el diestro malagueño en una faena de muleta en la que faltó antagonista. Tuvo eco la exposición del torero en algunos tramos del trasteo, pero la condición del animal no transmitió ninguna emoción al público. Estocada al segundo intento. Ovación
Ficha del Festejo:
Hierro de Vellosino – Hierro Álvaro Núñez – Portugal – Plaza de toros de Almería. Corrida de toros. Segundo festejo de la Feria de la Virgen del Mar 2025. Dos tercios de entrada. Toros de Álvaro Núñez (2º, 3º, 4º y 5º bis) y Vellosino (1º y 6º), bien presentados en líneas generales, pero desiguales en su juego y comportamiento en conjunto. Varios de ellos acusaron falta de raza en el último tercio. Destacó la nobleza del primero y la movilidad del tercero.
• FORTES, ovación tras aviso y ovación
• JUAN ORTEGA, ovación y silencio
• DAVID DE MIRANDA, que sustituye a Morante, dos orejas y oreja con leve petición de la segunda











