Roca Rey abre la Puerta Grande de Dax
Mundotoro.- Enloqueció Dax con Roca Rey en una tarde que comenzó de la mejor manera, con el cartel de no hay billetes. Tarde de figura del torero peruano, que cortó las dos orejas del quinto en una labor que conectó con los tendidos por su emoción. Un nuevo toque de atención dio Tristán Barroso en el coso francés después de pasear una oreja del tercero y de firmar ante el sexto una faena que de no ser por la espada le habría abierto la Puerta Grande. Pocas opciones tuvo Juan Ortega, que sorteó el lote de menos opciones.
El quinto, un toro alto y estrecho de sienes, salió desordenado y suelto en el capote de Roca Rey. Sin embargo, la labor del peruano fue clave para ordenar esas embestidas en una gran faena de muleta. Una actuación de largo metraje, intensa y marcada por la emoción de Roca Rey, que explayó su toreo para conquistar al público francés con un toro de Juan Pedro venido a más. Dos avisos. Dos orejas.
Aprovechando la fijeza y la movilidad del segundo, Roca Rey levantó las primeras ovaciones de la tarde en un recibo capotero de alto voltaje. A continuación, el Juan Pedro se llevó por delante de forma espectacular al caballo, levantándole las cuatro patas del piso con poder y tirándole al suelo donde se ensañó buen rato con él sin que nadie viniera al quite. Fue bravo en la segunda donde lo pusieron en suerte muy cerca, así como en la tercera donde se le colocó mejor. El picador José Manuel Quinta fue ovacionado. A toro pasado y visto lo visto, muchos se preguntarán por qué haberle recetado tres puyazos. Ahí quedó la bravura y ahí quedaron las fuerzas y después de ponerse por ambos pitones Roca Rey abrevió de un espadazo letal. Palmas. Pitos en el arrastre.
El tercero embistió con una pizca de genio y sin romper de verdad en el capote de Tristán Barroso que lo empujó para delante hasta los medios. El de Juan Pedro acudió con prontitud dos veces en el peto, pero sin emplearse del todo. El principio de faena fue un toma y daca al sacar el toro lo que se tenía guardado y Tristán Barroso, a pesar de su bisoñez, le pudo al Juan Pedro que embistió primero con más rabia que ritmo, pero siempre fijeza antes de sacar su mejor fondo en varias series por ambos pitones que entusiasmaron al público. Fue toro de esfuerzo y Tristán Barroso lo hizo. Mató de buena entera en lo alto al segundo intento y cortó una oreja. Palmas en el arrastre.
El sexto fue otro toro de buenas hechuras con el que dejó Barroso buenas verónicas. Comenzó su faena de rodillas con unos muletazos sobre la mano derecha llenos de mando en el centro del ruedo. Dejó buenos naturales también en una actuación destacada hasta el momento de entrar a matar. Gran ovación para el diestro.
El primero, castaño, se desplazó sin mucho fuelle en el capote de Ortega, antes de empujar dos veces en el peto. Colocó muy bien la cara en la brega y en los doblones mandones iniciales de Ortega. Sin embargo, después de una primera tanda de derechazos limpios el Juan Pedro empezó a puntear. Ortega probó por el otro pitón y dio un natural de categoría cuando el toro siguió el engaño hasta el final. Poco más pudo hacer el torero que mató en dos tiempos. Silencio.
Pocas opciones tuvo Juan Ortega con el cuarto de la tarde, un toro con el que se lució con el capote a la verónica y con un ceñido quite por chicuelinas. La complejidad del astado, que fue áspero de comportamiento, imposibilitó el lucimiento del sevillano.
Ficha del Festejo:
Hierro de Juan Pedro Domecq – Plaza de toros de Dax, Francia. Corrida de toros. Segundo festejo de la feria de agosto de Dax. Lleno de ‘No hay billetes’. Toros de Juan Pedro Domecq, de buena presentación en líneas generales y buen juego, excepto el primero y el cuarto, de nulas opciones para el torero.
• JUAN ORTEGA, silencio y silencio.
• ROCA REY, palmas y dos orejas.
• TRISTÁN BARROSO, oreja y ovación.











