A pesar de las perspectivas inestables de los mercados mundiales, España está mostrando una impresionante capacidad de resistencia con un crecimiento del PIB que supera al de otros países de la zona euro. Los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) indican un crecimiento interanual del PIB del 2,8 %, mientras que el crecimiento intertrimestral es del 0,7 %, más que cualquier otro país. Solo Portugal (0,6 %) y Estonia (0,5 %) registraron crecimiento en el mismo periodo.

La economía española repunta en el segundo trimestre

La mejora de la inversión empresarial, el repunte del consumo de los hogares y el aumento de las tasas de empleo son los principales motores del impresionante crecimiento de España en el segundo trimestre. El país ha vuelto gradualmente a una situación de estabilidad en los últimos cinco años y ahora lidera la recuperación de la zona euro. Las actividades económicas en toda España, desde el comercio internacional y forex trading hasta los mercados nacionales, han mostrado resistencia en medio de los dificultades generalizadas de las economías europeas.

Una de las razones de la resistencia económica de España es que no depende en gran medida de las exportaciones a Estados Unidos. Con la temporada alta turística a la vuelta de la esquina, según las previsiones del Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC), España está lista para añadir unos 260 500 millones de euros al PIB.

Pero este crecimiento no es ni aislado ni nuevo; en 2024, el PIB de España creció un 3,2 %, casi cinco veces más que la media de la zona euro y más que Estados Unidos. Algunas de las razones que impulsan el crecimiento económico de España este año son:

Menor inflación y tipos de interés

La caída de los tipos de interés, especialmente de los hipotecarios, ha mejorado la demanda en el sector inmobiliario español. El Banco Central Europeo (BCE) ha recortado su tipo de interés de referencia varias veces en los últimos 12 meses, lo que ha influido en la demanda interna de préstamos en todos los sectores. Según Peter Vanden Houte, economista jefe de ING, la bajada de los tipos de interés supone un repunte del sector de la construcción en España.

Tras tres meses consecutivos de descenso, España registró en mayo una nueva tasa de inflación mínima en siete meses, del 1,9 %, continuando con la tendencia de desaceleración de la inflación. Sin embargo, la inflación subió al 2,2 % en junio, a pesar de las expectativas de que se mantuviera en el 2 %.

Aumento de los salarios y mayor crecimiento del empleo

En febrero, el Consejo de Ministros aumentó el salario mínimo en un 4,4 %. Este crecimiento salarial, a su vez, contribuye al aumento de la demanda interna, especialmente tras la expansión del mercado laboral en el segundo trimestre. España registró un crecimiento más sólido del sector del empleo, con una caída del desempleo hasta el 10,29 %, su nivel más bajo en 17 años, lo que supone un nuevo hito con más de 22 millones de personas empleadas. En sus Perspectivas del Empleo 2025, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) señala que el salario mínimo en España aumentó un 3,1 % en términos reales en comparación con enero de 2021.

Impactos positivos de la inmigración

Otra razón por la que la economía española está creciendo es la llegada de inmigrantes altamente cualificados y con un alto nivel de formación. Este cambio demográfico impulsa la economía española en la dirección correcta, contribuyendo a una mayor rentabilidad de las inversiones en capital humano. A pesar del débil consumo público, el aumento del número de inmigrantes con mayor potencial de ingresos mejorará la demanda interna e impulsará la oferta de producción en el futuro. La respuesta del Gobierno, incluidas las inversiones en el sector de la vivienda, contribuye al crecimiento del PIB.

El sector servicios registra un crecimiento

El índice PMI de actividad empresarial del sector servicios de HCOB España aumentó de 51,9 en junio a 55,1 en julio, gracias al aumento sostenido de la actividad empresarial, que impulsó el crecimiento del PIB. Este fuerte aumento de la actividad empresarial es el más rápido desde febrero y se basa en varios factores, entre los que se incluyen el fortalecimiento de la demanda interna, la mejora de la calidad de los servicios y la eficacia de las iniciativas de marketing. Según Jonas Feldhusen, economista del Hamburg Commercial Bank, los sectores de servicios y manufacturero están impulsando la «expansión generalizada» de la economía española en la segunda mitad de 2025.

El crecimiento de España contrasta con el de la zona euro

El impresionante crecimiento de España contrasta con las cifras previstas para Alemania, Italia, Francia y otros países de la zona euro, que registraron un crecimiento plano en el segundo trimestre. Alemania experimentó una contracción del 0,1 %, mientras que Francia e Italia registraron un ligero crecimiento del 0,1 % en el mismo periodo. Sin embargo, España cuenta con la ventaja de un sector turístico en auge en 2025 en comparación con otros países de la zona euro.

En Francia, la incertidumbre política frenó la economía en el segundo trimestre, ya que la demanda interna y el empleo se desplomaron en julio, según una reciente encuesta de S&P Global. El PMI de servicios de HCOB Francia cayó de 49,6 en junio a 48,5 en julio, lo que supone un empeoramiento de la contracción (lecturas por debajo de 50).

Una situación similar se produjo en Alemania, donde la fuerte caída de las exportaciones de productos alemanes antes de la imposición de aranceles ralentizó el crecimiento. Alemania también registró un aumento del consumo y del gasto público en el primer trimestre, a pesar de la disminución de las inversiones en el mismo periodo. La mayor economía de Europa ha revisado ahora su tasa de crecimiento para 2025 al 0,0 %, pero espera que el nuevo acuerdo comercial con Estados Unidos impulse la recuperación.

Al otro lado del Adriático, Italia también se enfrenta a sus propios retos. Destacan dos datos contrastados: la economía cayó un 0,1 % en el segundo trimestre en comparación con el primero, pero creció un 0,4 % en términos interanuales. ¿Por qué? Los analistas creen que la responsable es la ralentización del crecimiento en la pesca, la silvicultura y la agricultura. Sin embargo, también hay algunos aspectos positivos, como el aumento de la demanda interna y una mayor estabilidad del sector servicios, a pesar de otros retos. Según el ministro de Economía y Finanzas, Giancarlo Giorgetti, Italia sigue en camino de alcanzar un crecimiento del 0,6 % para este año.

España, lista para crecer en 2025

Con varios indicadores que apuntan a un crecimiento general para finales de año, Evi Pappa, profesora de macroeconomía en la Universidad Carlos III, cree que España «superará las expectativas» basándose en los datos del primer y segundo trimestre. Sin embargo, el Gobierno deberá mantener el impulso actual para garantizar que la eventual disminución del turismo y el impacto de los aranceles estadounidenses no afecten gravemente a la economía.