Con la pureza y el temple que caracterizan su toreo, Christian Parejo, torero de Chiclana, ha conquistado poco a poco el corazón de Francia, país donde ha forjado buena parte de su carrera. Ahora, Parejo se prepara para afrontar una cita trascendental en su temporada en Béziers, la ciudad que lo acogió, con un cartel de lujo. Será una oportunidad más para demostrar su crecimiento y dar un nuevo golpe sobre la mesa como uno de los toreros emergentes más destacados.

‘Está siendo un año de madurez. Quizás no estoy toreando todo lo que me gustaría, pero he estado en fechas y plazas muy importantes en las que he dado mi mejor versión cada tarde’, sostiene Christian Parejo.

Una de ellas tuvo lugar el pasado mes de junio en Las Ventas, donde tuvo una actuación notable y llena de entrega. ‘Creo que los profesionales pudieron ver los resultados del trabajo realizado durante el invierno. Cada fecha es importante para mí, e intento estar a la altura de cada cita’.

El próximo día 15 de agosto, Christian Parejo se vestirá de luces para afrontar otro día decisivo en su temporada: Béziers, una ciudad que ya considera como su hogar y con un cartel de categoría. ‘Llevo seis años viviendo en Béziers y me siento como en casa. Le tengo bastante cariño. Es un compromiso de mucha responsabilidad. Además, estoy acartelado con dos figuras del toreo, como son el maestro Sebastián Castella, por sus veinticinco años de alternativa, y el maestro José María Manzanares, al que admiro mucho. Es un sueño’, explica el torero.

Los toros llevarán el hierro de Jandilla, una de las ganaderías que forma parte significativa de su trayectoria. ‘Tengo buenos recuerdos con ella. Tomé la alternativa con una corrida de Jandilla. Ojalá ese día pueda ayudarnos para triunfar’.

En Béziers habrá muchas miradas puestas en Christian Parejo. Fue uno de los novilleros con picadores puntero e ídolo en el país galo. Ahora es uno de los toreros jóvenes que tienen una mayor proyección. ‘Un posible triunfo o una buena imagen de mí espero que sirvan para volver y que alguna plaza que no he podido pisar este año podamos hacerlo el próximo’.

El duro trabajo invernal para seguir evolucionando y ahondando en su tauromaquia se está viendo reflejado en los ruedos. ‘A medida que vas toreando y además lo haces en sitios importantes como Madrid, te hace dar lo mejor de ti en cada entrenamiento o en cada tentadero. Intento enfocarme en mejorar y que sirva para crecer profesionalmente’.

En el horizonte tiene otro compromiso de envergadura en su año: su encerrona en Boujan-sur-Libron. ‘Quería agradecerle a Francia todo el apoyo que me han brindado. Llegué sin caballos. Siempre han estado ahí. Es ya un cariño mutuo. Va a ser un homenaje a Francia con una cuadrilla de allí, al igual que la ganadería. Es una corrida goyesca y espero que sea una tarde especial’, concluye Christian Parejo.