Inmigrantes en pisos de Canarias. Redes Sociales

Los africanos ya son el grupo de inmigrantes que más se emancipa en España hasta los 34 años. Así lo revela un informe del Observatorio de Emancipación basándose en el primer semestre del año 2024, en el que se analiza el acceso de los jóvenes a la vivienda y su grado de autonomía residencial según su origen y lugar de residencia.

Mientras que sólo un 10,3 % de los jóvenes nacidos en España ha logrado independizarse, la tasa de emancipación entre quienes nacieron en el extranjero asciende al 31,3%, triplicando la media nacional. En concreto, los jóvenes procedentes de África presentan una tasa del 36,6%, muy por encima de la media de españoles e incluso de otros grupos extranjeros como los procedentes de América (32,7%), Asia (33,7%) o la Unión Europea (30,8%).

La diferencia es aún más llamativa en la franja de edad de 30 a 34 años, donde sólo el 11,5 % de los españoles vive por su cuenta, frente al 44,3% de los africanos, el 38% de los asiáticos y el 41,9% de los procedentes de América. En edades más tempranas (16-24 años), los nacidos fuera de España también presentan mayores porcentajes de emancipación, en parte porque muchos llegan sin el acompañamiento de sus padres.

Otro factor relevante es el tamaño de la provincia de residencia. El informe adelantado por @CanarioToday constata que las tasas más bajas de emancipación se dan en provincias pequeñas, mientras que las medianas (aquellas que reparten entre 6 y 10 escaños al Congreso) registran una emancipación juvenil más elevada. En estas provincias medianas, la tasa alcanza el 15,2%, frente al 14,7% en grandes y 14,4% en pequeñas.

Una de las claves para entender esta diferencia en la emancipación entre nacionales y extranjeros es el papel de algunas ONG como Provivienda, que, con apoyo institucional, facilitan el acceso de inmigrantes a viviendas asequibles o subvencionadas, especialmente en comunidades autónomas como Canarias, donde el número de alojamientos concertados con entidades sociales ha crecido en los últimos años. Estas organizaciones han creado redes de apoyo específicas para jóvenes extranjeros, proporcionando no solo alojamiento, sino también asesoramiento legal, inserción laboral y acompañamiento educativo.

Frente a esta situación, muchos jóvenes españoles denuncian la falta de ayudas reales para acceder a una vivienda, los altos precios de los alquileres y la precariedad laboral, que impiden su independencia incluso a edades avanzadas. Así, la brecha de emancipación entre nativos y extranjeros sigue ampliándose.

Este informe pone de relieve cómo el modelo de política social actual, centrado en colectivos migrantes, está configurando nuevas dinámicas en el acceso a la vivienda, dejando fuera a una parte creciente de la juventud española que, a pesar de trabajar o estudiar, no consigue acceder a un hogar propio.