Hermann Tertsch

“Franco construyó más de 4 millones de viviendas sociales. Toda la política de vivienda del PSOE ha sido quitar las placas para que las nuevas generaciones no lo sepan”, ha escrito en Twitter el eurodiputado de Vox, Hermann Tertsch.

El Europarlamentario del Partido verde recuerda también que “entre 1939 y 1975 Franco construyó presas, regó, saneó y electrificó”, añadiendo que “el PSOE destruye presas, centrales, regadío y revive el apagón”.

Estas manifestaciones de Tertsch son una más de las que pueden leerse estos días en redes sociales y que avivan el debate en torno a la política de vivienda pública del franquismo en comparación con las actuales. De hecho, la España de Franco se convirtió en el país europeo con un mayor porcentaje de propietarios de viviendas.

La escasez de oferta en los mercados y los grandes precios para el acceso, son un quebradero de cabeza para muchas personas que no logran independizarse. En los últimos 10 años el precio de los alquileres ha subido un 78%, según ha publicado el portal inmobiliario Fotocasa.

En ese mismo periodo de tiempo, los salarios mínimos en España han subido un menos 5,7%. No son unos buenos datos, que se suman a la falta una política real de construcción de vivienda pública de alquiler social.

“Últimamente tengo miedo de estar volviéndome franquista. A ver si me explico, Franco, construyó muchísima vivienda social. Mis padres, con seis hijos, tuvieron una. Y desde la llegada de la democracia eso se acabó”. Francisco Javier, autor del fragmento de esta carta, es uno de los tantos españoles que están cansados de ver que sus hijos no pueden independizarse por las condiciones del mercado inmobiliario. Cada día más españoles se preguntan por qué no se construye “un parque público de verdad, con miles de viviendas que hagan la competencia a los fondos de inversión”.

La respuesta debería ser así de simple: cuando prevalece el interés de los españoles, no hay sitio para los colores políticos.