El FC Barcelona ha conseguido esta noche una importante victoria (5-0) ante el Atlético de Madrid en la sexta jornada de la Liga BBVA, que le permite coger aire y confianza, gracias a un gran juego colectivo y a una mejor adaptación al 3-4-3 que tantos problemas dio en la primera parte de Mestalla. Con Messi inspirado –sumó otro ‘hat-trick’– y un centro del campo que movió el balón como nunca, los de Guardiola no pasaron ningún apuro para retener los tres puntos.

Eso sí, el único peligro ‘colchonero’ bien pudo haber hecho cambiar el signo del partido, pero el larguero repelió el disparo del portugués Tiago a los cuatro minutos. Tras este aviso, los directores de juego locales desplegaron su arte para ir confeccionando un partido a medida de los intereses catalanes con frutos inmediatos. Con un 3-4-3 funcionando casi a la perfección, y las grandes estrellas rojiblancas Diego y Falcao apagadas, no tardó David Villa en aprovechar una genial asistencia de Xavi para, en una acción personal que denota su estado de gracia, dejar sentado a Perea y Miranda para endosarle el primero a un Courtois que no guardará para nada un buen recuerdo del Camp Nou. Pero todavía quedaba mucho y la pesadilla para el belga no había hecho más que empezar. Si en Valencia fue Valdés quien vio como le superaba un compañero, en esta noche el de L’Hospitalet no tuvo trabajo y vio como su colega rojiblanco puso cara de incrédulo al ver a Miranda hacerse un autogol. También antes de la media hora de juego llegó el primer gol de Messi.

Con el partido encarado, fue la ‘Pulga’ quien se encargó de cerrarlo. Porque sus compañeros le buscan, porque se ofrece y se desvive también en defensa, por ello se le permite a Messi que a veces no levante la cabeza para ver los desmarques de los suyos. Y es que la faceta de asistente de Messi ha crecido tanto y la utilizado tanto últimamente que esta noche quiso darse un homenaje, y fue un festín. En su primer gol impuso su sello. Sacó de banda, se asoció en pared milimétrica con Pedro y, a partir de aquí, puso la directa hacia la portería haciendo uso de quiebros de cadera y cambio de ritmo para colársela al joven portero belga por su palo corto.

Tras el descanso, con el Barça controlando el ‘tempo’ del juego, tardó más en activarse pero poco a poco fue buscando el gol hasta encontrarlo en el ’77, cuando se salió con la suya para volver a marcar y dejar a su vez retratada a la defensa del Atlético. Controló y en una ya más que vista diagonal fue dejando rivales atrás para volver a cruzar el balón ante un impotente Courtois. Ya en el descuento, se asoció con Villa para anotarse el ‘hat-trick’ personal y conseguir otra ‘manita’ para los blaugrana, que encaran el duelo de ‘Champions’ contra el BATE Borisov en las mejores condiciones.

Cesc, con gran presencia, se quedó sin marcar y sin igualar el récord de César y Zlatan Ibrahimovic de ‘mojar’ en las primeras cinco jornadas de Liga, pero volvió a demostrar que puede jugar junto a Xavi, Thiago e Iniesta en cuanto regrese sin que se resquebraje el juego blaugrana. Por cierto, Piqué volvió un mes después al equipo y Guardiola ya podrá disponer de su pareja de centrales más habitual junto al capitán Carles Puyol.