Más de un 45% de los austriacos considera que la integración de los inmigrantes en su país ha fracasado
La desconfianza hacia las políticas de integración de inmigrantes se dispara en Austria y la mayoría de la población ya las considera un fracaso. Según los últimos datos de un sondeo nacional, sólo un 20,9% de los austriacos opina que la convivencia con los inmigrantes funciona “muy bien” o “bien”, mientras que casi la mitad (46,2%) afirma que funciona “mal”. En apenas tres años, el apoyo a las políticas de integración se ha desplomado más de 13 puntos: en 2022 aún superaba el 34% y hace tres años era del 28%.
El sondeo refleja un rechazo creciente hacia unas políticas impulsadas por los sucesivos gobiernos que, lejos de frenar los problemas derivados de la inmigración, los han agravado.
Pese a este panorama cada vez más sombrío, la ministra de Integración, Claudia Plakolm, se ha limitado a repetir su mensaje habitual: “Si quieres vivir en Austria, debes aprender alemán, trabajar, mantenerte y seguir nuestras reglas”. Una declaración que para muchos llega tarde y que no oculta la realidad: la confianza de los austriacos en el modelo de integración actual se ha desplomado.













El resto, son inmigrantes.