Caso PSOE: El juez prohíbe salir de España al empresario amigo de Cerdán y mantiene las sospechas por el pago de mordidas a la trama
El magistrado del caso Koldo, Leopoldo Puente, ha retirado el pasaporte a los dos empresarios a los que ha interrogado este lunes por el presunto amaño de obras públicas. Así, el que fuera directivo de Acciona, Fernando Merino y el dueño de Servinabar, Antxon Alonso, han quedado en libertad provisional tras ser interrogados en sede judicial, aunque el juez les ha impuesto medidas cautelares tales como la retirada del pasaporte, la prohibición de salir de España y comparecencias quincenales en el juzgado más cercano a su domicilio.
En sendos autos, el instructor del caso Koldo ha explicado que persisten sólidos indicios contra ambos por haberse beneficiado, presuntamente, de sus vínculos con la trama para adjudicarse contratos de obra pública. De lo plasmado en los autos conocidos este lunes se desprende que el magistrado no ha dado especial validez a los testimonios de los dos imputados, que han negado irregularidad alguna con las licitaciones bajo sospecha.
De Antxon Alonso el magistrado sostiene que los indicios que destapó la UCO en su último informe “en modo alguno” pueden considerarse desvirtuados” con la declaración de este lunes en sede judicial. Al respecto ha apelado a sus vínculos con Koldo García, con quien constituyó al 50% la cooperativa Noran Coop, y también a la creación de Servinabar, la empresa que se adjudicó las principales licitaciones investigadas en UTE con Acciona.
Da validez al documento firmado con Cerdán
Además, el juez otorga validez al documento que encontró la UCO en el registro de su domicilio el pasado 10 de junio según el cual Santos Cerdán habría adquirido por 6.000 euros el 45% de la firma Servinabar. Tanto el exdirigente socialista como el empresario han negado en sede judicial que dicho documento sea válido puesto que no se llevó ante notario. Ambos defienden que se firmó en un momento en que Cerdán barajó dejar la política pero que luego reculó y todo quedó en punto muerto.
El magistrado, sin embargo, no respalda esta teoría. “Es verdad que tanto don Santos Cerdán como el propio don Joseba Antxon Alonso han asegurado en sus respectivas declaraciones que decidieron después verbalmente resolver el contrato, sin elevarlo a público y sin que, en definitiva, llegara a ejecutarse (pese a lo cual, ese pretendido borrador se encontraba, sin embargo, fechado y firmado). No impresiona el documento privado como una simple manifestación, más o menos improvisada, de voluntad de la que después las partes se separaran transcurrido apenas un fin de semana”, explica.
Además, asegura que “no se explica tampoco fácilmente el motivo por el cual don Joseba Antxon, buen amigo de don Santos según se proclama, conservaba el documento privado, tantos años después, en su propio domicilio”, así como tampoco que posteriormente a la firma de la fecha, en 2018, interviniera Santos Cerdán en una donación desde Servinabar a Fiadelso,la fundación de José Luis Ábalos, que también está bajo la lupa de los investigadores.











