Zelenski ve las orejas al lobo y se abre por primera vez a la paz con Rusia: «Es hora de hacer las cosas bien»
El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, en una imagen de archivo.
En 72 horas, el presidente ucraniano ha visto claramente quién le puede ayudar de verdad y quiénes, con su ridícula fanfarria belicista, y sus planes de gasto y rearme de pura chirigota, solo le estaban metiendo en un agujero cada vez más hondo.
El gozo de los lídercillos europeos, en el pozo de la realpolitik.
“Compromiso de Ucrania con la paz”
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, más al límite que nunca después de que Donald Trump cortara el suministro militar a Ucrania esta madrugada, ha vuelto a quitarle hierro al asunto de su discusión con el presidente estadounidense el pasado viernes en la Casa Blanca, a la par que ha afirmado «el compromiso de Ucrania con la paz», ha esbozado un primer plan para la paz y ha confirmado su intención de firmar «cuando y como sea el pacto de los minerales con Estados Unidos».
«Quisiera reiterar el compromiso de Ucrania con la paz. Ninguno de nosotros quiere una guerra sin fin. Ucrania está dispuesta a sentarse a la mesa de negociaciones lo antes posible para lograr una paz duradera. Nadie quiere la paz más que los ucranianos. Mi equipo y yo estamos listos para trabajar bajo el fuerte liderazgo del presidente Trump para lograr una paz duradera. Estamos dispuestos a trabajar rápidamente para poner fin a la guerra, y las primeras etapas podrían ser la liberación de los prisioneros y la tregua en el cielo —prohibición de misiles, drones de largo alcance, bombas sobre energía y otras infraestructuras civiles— y la tregua en el mar inmediatamente, si Rusia hace lo mismo. Luego queremos avanzar muy rápido por todas las etapas siguientes y trabajar con los Estados Unidos para llegar a un acuerdo final sólido» ha afirmado en su cuenta de X.
Las principales críticas de Trump hacia el ucraniano —y por extensión todo su equipo, desde JD Vance hasta Marco Rubio— han ido por lo que ellos consideran «el rechazo de Zelenski a buscar la paz». Realmente, el ucraniano buscaba unas garantías de seguridad para asegurarse que Rusia no volverá a atacar, tal como ya ha ocurrido en el pasado. Ahora, Ucrania da un primer paso hacia la paz presentando este boceto de tregua, con un alto el fuego en el cielo y en el mar.
«Realmente valoramos lo mucho que Estados Unidos ha hecho para ayudar a Ucrania a mantener su soberanía e independencia. Y recordamos el momento en que las cosas cambiaron cuando el presidente Trump proporcionó a Ucrania Javelins. Estamos agradecidos por esto. Nuestra reunión en Washington, en la Casa Blanca el viernes, no salió como debía. Es lamentable que haya sucedido así. Es hora de hacer las cosas bien. Nos gustaría que la cooperación y la comunicación futuras fueran constructivas. En cuanto al acuerdo sobre los minerales y la seguridad, Ucrania está dispuesta a firmarlo en cualquier momento y en cualquier formato conveniente. Consideramos que este acuerdo es un paso hacia una mayor seguridad y sólidas garantías de seguridad, y realmente espero que funcione eficazmente» ha añadido el mandatario ucraniano.
Es un claro paso atrás de Zelenski y un acercamiento hacia Estados Unidos, por lo que se demuestra el éxito de Trump en su estrategia de presión paralizando la ayuda militar y dejando a Ucrania dependiente de una Europa que no la puede proteger sola.
Recientemente, tanto el presidente francés Emmanuel Macron como el primer ministro británico Keir Starmer —ambos visitaron a Trump la semana pasada en Washington— ya habían esbozado la propuesta de una tregua parcial de un mes. Sería una «tregua en el aire, en los mares y en las infraestructuras energéticas» explicó el presidente francés al diario Le Figaro. La misma propuesta que pone ahora Zelenski sobre la mesa.
Queda por ver ahora cómo responderá Estados Unidos —Trump da esta madrugada su primer discurso en el Congreso—, como la propia Rusia. Por el momento, el Kremlin ya había considerado como positivo la suspensión de la ayuda militar. «Es una decisión que, efectivamente, puede empujar al régimen de Kiev a (participar en) un proceso de paz», dijo Dmitri Peskov, el portavoz presidencial ruso, en su rueda de prensa telefónica de este martes.
Sorprende que la mayor parte de los analistas de nuestros medios, incluso los que presumen de derechistas liberales, prevengan una y otra vez contra Rusia. Estados Unidos desencadena el infierno en Afganistán, en Irak, antes en Serbia con apoyo de España y no pasa nada. Todo está justificado. USA y la Gran Bretaña nos tiene invadidos con bases militares y no dicen nada. Rusia invade una parte rusófona de Ucrania y nos quieren llevar a la guerra. Ninguno dice la verdad. Rusia ha demostrado que tiene capacidad militar para enfrentarse a la última tecnología occidental, incluso la supera. Tiene además… Leer más »
Perfectamente analizado.
Así es, pero parece que los españoles no se enteran.
Yankees go home!! Llevan un siglo en Europa y ya va siendo hora de que se queden en su pais. Europa por su cuenta tiene que volver a ser ella misma…todas las amenaza que hya sobre Europa son porque hemos dejado de lado a Dios, nuestro protector. Nos pasa como al pueblo elegido que cuando abandono a Yaveh fueron invadidos…
Absolutamente de acuerdo,Lostrego. Pero en Europa cada país debe pensar en lo suyo y desarrollar su política de defensa, economía, etc de forma propia e independiente. A mí, personalmente Europa me importa un soberano comino, sólo me preocupa España y como patria chica Cataluña y Barcelona. No tengo nada en común con un lituano, un sueco o un polaco con la única salvedad de compartimos un continente y somos cristianos. No podemos llevarnos bien con Gran Bretaña porque tienen parte de nuestro suelo patrio ocupado y nos imponen su lengua y cultura a macha martillo, no podemos apoyar a las… Leer más »
Si, como vd. muy bien dice, todos los nombrados son pueblos cristianos, tenemos en común lo más importante : la Fe.
Pero el problema es que arrebatándonos la Fe, que es lo que hacen, y lo que quieren : esta situación de desencuentro, de indiferencia, y, hasta de una soterrada hostilidad. a la que nos instigalos l que nos dividen, para así aniquilarnos. No permitir.