Karmen Garrido, presidenta de FEPET, señalada por presuntamente colocar a dedo un asesor incumpliendo los estatutos de la Federación
La presidenta de la Federación Española de Periodistas y Escritores de Turismo, Karmen Garrido, quién también tiene lazos con el Rotary Club y ostenta una dilatada trayectoria en medios de comunicación, no pasa por su mejor momento.
Tras ser designada como presidenta de FEPET el pasado mes de junio, en unas elecciones donde solo se presentó una candidatura, Karmen Garrido es la nueva presidenta en sustitución de Mariano Palacín, que ha presidido la agrupación turística durante 25 años. Tras llegar a la presidencia Garrido rompió relaciones con Palacín entre acusaciones que transcendieron a los asociados y parte de la sociedad, con declaraciones que se consideraron inoportunas y desconsideradas por gran parte de la federación que preside.
En el nuevo Comité Ejecutivo, que ha sido renovado en siete de sus nueve miembros, figuran, según la web oficial de la Federación, profesionales como Carlos Cuesta, Miguel Ángel Mocholi y Fernando Fraile como vicepresidentes; Concha Pelayo como secretaria y Álvaro Fabra como Tesorero. Además, Ignacio Vasallo, Muriel Feiner y Miguel Rodero son vocales. Como director general, ha renovado Enrique Sancho que ya ostentaba el cargo desde hace diez años.
PETICIÓN DE APERTURA DE EXPEDIENTE POR PARTE DE LA PROPIA EJECUTIVA
La realidad es que el camino de la FEPET no pasa por su mejor momento con una ejecutiva fraccionada y golpes de ciego que han terminado con la petición de apertura de expediente sancionador para la presidenta por un miembro de su propia ejecutiva, quien solicita que se investiguen hasta 5 faltas -dos de ellas graves- que le achaca a la cabeza visible de la organización.
En concreto el asunto más peliagudo versa respecto al nombramiento de un asesor personal adjunto a la presidencia, quién presuntamente fue nombrado en una reunión al margen de las normas de la propia asociación, y donde el propio nombramiento contraviene los estatutos.
El documento que obra en poder de este medio está fechado el pasado 20 de febrero, y por lo tanto ahora es la misma ejecutiva implicada en los hechos quien tiene que resolver la situación planteada. En cualquier caso, un asunto complejo que no parece tenga un final de consenso a la luz de las fuentes internas consultadas.
El autor del documento presentado ante la Federación, reconocido periodista inhouse y licenciado en derecho, ha omitido entrar al barro ante nuestra llamada, declarando que “no hablo de los asuntos internos de ninguna organización a la que pertenezco, pero si su pregunta es si existe ese documento del que me habla, la respuesta es sí, aunque preferiría mantener el asunto en la privacidad del seno de la organización”, nos expone amablemente ante la insistencia de nuestro reportero.
Estaremos atentos a la evolución de este asunto que empaña la imagen de la Federación y de su propia presidenta, al menos mientras no se resuelva la compleja situación.













Rotary club=Masonería
por su actitud ególatra se veía venir que terminaría mal