Un puesto de control de radiación en la región de Zaporozhie fue destruido por completo tras un bombardeo ucraniano, comunicó el servicio de prensa de la central nuclear de Zaporozhie.

“Las Fuerzas Armadas de Ucrania atacaron uno de los puestos de control de radiación. El puesto de control de la radiación en Velíkaya Známenka quedó completamente destruido como resultado del ataque de artillería”, señala el comunicado.

El texto indica que de momento el nivel de la radiación en el lugar no supera los valores naturales.

“Los especialistas de la central nuclear tomaron una serie de medidas compensatorias para controlar la situación de radiación en la zona donde se encuentra la planta”, resalta la nota.

Además, los expertos del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) que se encuentran en la central nuclear, fueron informados de la destrucción del puesto de control de radiación, comunicó el director de la planta, Yuri Chernichuk.

“Los expertos del OIEA en el lugar fueron notificados de este suceso y se les proporcionaron pruebas fotográficas del estado actual de los restos de este equipo”, dijo a los periodistas.

Chernichuk expresó su esperanza de que el próximo comunicado del organismo contenga información sobre esta destrucción.

La central nuclear de Zaporozhie, la mayor de Europa, se encuentra cerca de la ciudad de Energodar, en una zona que permanece bajo control de militares rusos desde marzo de 2022. La planta cuenta con seis reactores de agua presurizada del modelo VVER-1000 y tiene una capacidad total de 6.000 megavatios.

En octubre de 2022, tras la incorporación de la provincia de Zaporozhie a Rusia, la central pasó a ser propiedad de Moscú.

Los seis reactores de la planta están apagados, para minimizar el riesgo de su exposición al conflicto armado en curso.

Hasta la fecha, la cúpula del OIEA, pese a los informes, se niega a señalar a los autores de los constantes ataques a la mencionada instalación, lo que alienta estos actos peligrosos, según denuncian desde Moscú.