Fernandao Maciel, del FC Barcelona Alusport , pugna la pelota con el cierre brasileño del Caja Segovia Geison Muller.

El Barcelona Alusport hizo historia al alzar su primera Liga ante el Caja Segovia (3-1) en el quinto partido de una vibrante final que sirvió de colofón a una temporada para enmarcar de los azulgranas, que han conseguido cuatro títulos y han dominado el fútbol sala español.

Una hazaña para una sección que apenas hace una década se movía en el terreno aficionado y que esta temporada, llevada en volandas por un extraordinario grupo de jugadores liderados por Marc Carmona, se ha hecho con Liga, Copa del Rey, Copa de España y Copa de Cataluña.
Pero cinco partidos le ha costado al equipo catalán imponerse a la osadía de un Caja Segovia descarado y valiente, que obligó al club azulgrana a realizar un llamamiento a sus seguidores. Y vaya si respondieron, llenando el Palau hasta los topes con 6.900 espectadores.

Una afición que explotó cuando a los nueve segundos Saad inauguró el marcador con un trallazo a la escuadra cajista (1-0). El Barcelona empezó bien su camino hacia el título, pero el Caja Segovia no fue un convidado de piedra en la final. Dominaron los segovianos el balón durante casi todo el primer tiempo, aunque de forma estéril ante la férrea defensa local. Monopolio del balón para los cajistas y ocasiones para los catalanes, que hasta en 17 ocasiones exigieron al meta Cidao a lo largo del primer tiempo.

Pero cuanto más se acercaba el descanso más se igualaron las fuerzas y se desataron los equipos de su corsé, ése propio del respeto que impone una final a todo o nada. Llegaron las ocasiones por ambos bandos y el ambiente se caldeó tras una fea entrada de Geison a Fernandao, quien ya se las había visto con Esquerdinha.

Intercambio de golpes

Fue un intercambio de golpes y de goles, pues poco después de que Carlos, tras un doble disparo, lograra el segundo para los culés, Esquerdinha recortó distancias con una vaselina de fantasía que batió a un hasta entonces pletórico Cristian (2-1, m.20).

El segundo tiempo pareció consumirse a toda velocidad para un impotente Caja Segovia, mientras el Barça fraguó su victoria con paciencia. Casi no hizo falta que Fernandao lograra el tercero a los 26 minutos. El Barça ya se sentía vencedor desde mucho antes.

Un tanto del meta Cidao (3-2, min.35) envalentonó a los visitantes, que tuvieron en las botas de Tobe forzar la prórroga. Pero con la bocina final el Palau desató por fin la celebración de una temporada increíble para la sección y el club. La victoria tiene este año el nombre del Barça.