¿Qué son los repulsados y para qué se utilizan?
Es una técnica que cada vez es más utilizada para la elaboración de un gran número de artilugios y elementos, si bien es cierto, para poder llevarla a cabo, es esencial contar con buenos profesionales expertos en el sector, como es el caso de Repulsados Lumar en Barcelona.
En el terreno industrial, son muchos los conceptos que se han ido acuñando día a día y que cada vez son más familiares. Si bien es cierto son los expertos los que dominan las diferentes técnicas que hay, en la actualidad, una de las más utilizadas es el repulsado. Para hacerse una idea de en qué consiste, hay que decir que el repulsado es una técnica laboriosa, a través de la cual, se procede a la deformación de una lámina metálica.
Dicha deformación se consigue haciendo uso de una matriz que, generalmente, es simétrica, la cual, va girando a velocidades elevadas dentro de un torno. Esta técnica es utilizada para poder crear un gran número de objetos metálicos, principalmente, aquellos que se presentan con un formato más difícil y complicado. La gran ventaja de esta técnica radica en que el procedimiento es mucho más económico que otras técnicas tradicionales como las que se llevan a cabo a partir de troqueles.
En definitiva, los expertos en la puesta en marcha del repulsado lo que hacen es fabricar piezas circulares, donde el acero inoxidable es el principal protagonista.
¿Dónde encontrar piezas de repulsado de calidad?
Si bien es cierto la técnica del repulsado se lleva a cabo en un gran número de talleres especializados en España, entre todos ellos, hay que destacar a https://repulsadoslumar.net. Se trata de una compañía con sede en Barcelona, que cuenta con más de 30 años de experiencia dentro de este sector.
Ofrecen un servicio de calidad, creando numerosas piezas a partir de la técnica de repulsado, con herramientas innovadoras y con una buena plantilla de profesionales que conocen a la perfección cómo lleva a cabo este tipo de procesos. Para ello, trabajan a partir de diversos tornos con diferentes tamaños y volúmenes, con el objetivo de poder elaborar piezas de todas las características, desde aquellas más pequeñas y complicadas, hasta otras de grandes series.
Para poder elaborar todas las piezas, en Lumar cuentan con una nave de más de 400 metros cuadrados, donde tienen instaladas sus máquinas, así como una zona para el almacenaje, tanto de los productos que ya están acabados, como de las materias primas que se utilizan para la fabricación de los mismos.
¿Qué productos ofrecen?
Teniendo en cuenta la experiencia que tienen en el sector y la maquinaria que utilizan, no es de extrañar que en Repulsados Lumar cuenten con un amplio catálogo de piezas elaboradas a partir de esta técnica. Como ya se ha mencionado, para poner en marcha el repulsado, se utilizan generalmente metales para la fabricación, y en Lumar, trabajan con los mejores materiales del mercado para este fin, desde acero inoxidable, hasta hierro, cobre o aluminio, entre otros.
La gran mayoría de productos que fabrican tienen unas medidas muy amplias, ya que ofrecen piezas pequeñas de unos 50 milímetros de diámetro, hasta otras de mayores dimensiones que pueden llegar hasta los 1.500. De igual modo, también moldean las piezas consiguiendo diversos grosores, siendo los más grandes de unos 6 milímetros.
Con respecto a los productos finales, hay que decir que desde Repulsados Lumar fabrican numerosos artículos, siendo los más populares las lámparas, ceniceros, ollas, copas de trofeos o incluso ojos de buey, entre otras cosas.
Hay que decir que esta empresa está especializada en la fabricación de piezas sueltas, satisfaciendo las demandas de los clientes, aunque también tienen la capacidad de crear unidades en serie, sobre todo para el terreno industrial.
Sectores habituales del repulsado
Las piezas elaboradas a partir del repulsado se pueden utilizar en numerosos sectores, si bien es cierto, los más habituales son para mobiliario urbano, ya que a través de esta técnica se crean elementos como las señales de tráfico; también artículos para la ventilación y filtración; en el terreno de la iluminación, como lámparas o focos; en el sector náutico, son habituales los focos para barcos o incluso refuerzos para escotillas; artilugios para los laboratorios como cubetas; en el área deportiva para trofeos; y, finalmente, en el sector de la hostelería industrial.